SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, Chiapas.- Un grupo de funcionarios del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, encabezados por Jorge Nava Gutiérrez, se reunió la tarde de este miércoles en Simojovel con los padres de los dos niños que perdieron la vida y 29 más que hospitalizaron después de recibir vacunas el pasado 8 de mayo.
En la iglesia de San Antonio de Padua, los observadores conversaron por varios minutos con el sacerdote Marcelo Pérez Pérez, quien atiende la comunidad La Pimienta, donde ocurrió el incidente.
En la plática, el párroco Marcelo explicó las condiciones en que viven los indígenas tzotziles de La Pimienta y otras comunidades de Simojovel.
El 8 de mayo fallecieron los niños Yadira González y Emmanuel Francisco López, de un mes de nacidos.
Además, 29 menores de cinco años de edad fueron internados en el Hospital “Gilberto Gómez Maza”, en la capital del estado, Tuxtla Gutiérrez, por presentar complicaciones después de recibir las vacunas contra la hepatitis B, rotavirus y tuberculosis.
Después de la conversación con el sacerdote Marcelo Pérez, el equipo de funcionarios de la ONU se trasladó a la comunidad La Pimienta, donde médicos y enfermeras del IMSS vacunaron a los menores de edad.
En la comunidad, el equipo de observación hablará con los padres de los 29 niños que permanecieron hospitalizados y que el pasado 25 de mayo fueron dados de alta los 2 últimos menores que aún seguían bajo vigilancia médica.
El lunes, los funcionarios de la ONU viajaron a Tapachula para conocer las condiciones laborales en las que se encuentran decenas de niños guatemaltecos.
Y el martes se reunieron en Tuxtla Gutiérrez con funcionarios del gobierno del estado.