MATAMOROS, Tamaulipas.- Un total de 724 millones de metros cúbicos de agua es lo que al final se tirará de las presas El Cuchillo y Marte R. Gómez hacia el mar por el río Bravo.
El desfogue del vital líquido inició hace un mes, lo que ocasionó que el nivel del río aumentara y provocara desbordamientos no graves en sitios donde parte del bordo fue robado.
“Hasta el momento, y gracias al apoyo que se le está dando a la Junta de Aguas y Drenaje (JAD), no se han suscitado problemas graves en zonas pobladas del área rural y de la ciudad”, dijo Enrique Zolezzi Treviño, comisario de la Red Mayor del Distrito de Riego 025, quien comentó que desafortunadamente los desbordes de agua han sido por negligencia de la JAD.
“Lo que sucede es que el desbordamiento que se dio en los ejidos Juanillo y Guadalupe fue porque se robaron parte del bordo de contención del río, y precisamente a la JAD le corresponde cuidar que no suceda esto”, aseguró.
“Sobre la filtración de agua que se dio del río hacia la avenida Tamaulipas, fue porque al organismo operador de la ciudad se le olvidó cerrar la compuerta que permite el desfogue del agua pluvial hacia el cauce por ese lugar”, comentó.
“Pero aquí lo importante es que, gracias a que se está realizando un desfogue de agua controlado de la presa Marte R. Gómez, no se han suscitado problemas de inundaciones en áreas con población”, abundó.
Aseguró que en los próximos días el nivel del río Bravo seguirá descendiendo debido a que la presa El Cuchillo dejó de trasvasar el vital líquido hacia la Marte R. Gómez.
A su vez, esta presa bajó de 300 metros cúbicos por segundo la liberación de agua que hacía, a 182.91 metros cúbicos por segundo, “y por ello el cauce del Bravo bajará”.
La presa El Cuchillo, precisó, tiene una capacidad de almacenamiento de mil 123 millones de metros cúbicos, pero llegó a captar mil 224 millones de metros cúbicos , y se pretende dejarla en 900 millones de metros cúbicos.
La Marte R. Gómez tiene una capacidad de 782 millones de metros cúbicos, pero tiene en estos momentos mil 25 millones de metros cúbicos, pero se pretende dejarla en 625 millones de metros cúbicos.
Esto se hace, debido a que dio inicio la temporada de huracanes, y si un fenómeno llegara a pegar en la región, si las presas se encuentran llenas lo que sucedería es que se reventarían.
Por ello se está realizando el desfogue, de manera preventiva, pues las presas deben quedar a un 80 por ciento de su capacidad, para captar el agua que pudiera llegar en un momento dado.