MATAMOROS, Tamaulipas.- Entre las colonias Derechos Humanos y los fraccionamientos San Manuel y Jardínes de San Juan, se encuentra una basurero clandestino en el que, además de desechos domésticos, se encontró material clínico, como bolsas de hemodiálisis, jeringas y diversos tipos de medicamentos.
Es a un lado del canal de aguas negras que separa a los sectores por donde a diario pasan por el puente peatonal decenas de personas, donde está este tiradero que ha ‘nutrido’ la contaminación que existe en la zona.
En un recorrido efectuado por este medio de comunicación, se ubicaron artículos empleados en unidades sanitarias, unos todavía empaquetados, sin usar, y otros, como pastillas y jeringas, abiertos e incompletos.
Librado Luna Pérez, pepenador del área, declaró que por la noche llegan camionetas al lugar a dejar los residuos, aunque hasta el momento no ha observado unidades con logotipos de hospitales de la ciudad.
“Tiran jeringas, medicamentos, no sabemos quién las tira. Se meten camionetas pero no he visto de clínicas”, dijo el entrevistado quien recogió y vendió algunas bolsas de hemodiálisis porque estaban empaquetadas y en buen estado.
El habitante de la colonia Derechos Humanos agregó que los carretoneros también son responsables del desastre ecológico que se presenta en ese punto al Sur de Matamoros.
Externó que las personas que se dedican a esta actividad lo han amenazado porque en varias ocasiones les ha impedido arrojar la basura que recolectan por la ciudad.
“Son los carretoneros, les he dicho que no tiren la basura aquí, pero se enojan e inclusive me amenazaron con un cuchillo porque me dijeron que quién era yo para prohibírselos”, enunció.
Luna Pérez expusó que en el 2014 se limpió la orilla del dren de aguas residuales porque se colocó un puente peatonal para comunicar a los sectores, pero la falta de supervisión por parte de la autoridad ha incentivado esta situación.
Zona de infección
Por el puente a diario pasan trabajadores y vecinos para abordar las unidades de transporte público, pero también menores de edad que se dirigen a las instituciones educativas de esa zona de ciudad.
Una madre de familia pidió la intervención del gobierno porque el foco de infección tiene en riesgo a decenas de niños que radican en ese lugar.
“Hay gente que tiene niños chiquitos y esto es un peligro de infección”, dijo.
Y es que a la basura regada en la extensión del canal, se le agrega que se depositan animales muertos, lo cual agudiza los olores fétidos que diariamente respiran las familias de esas colonias.
Al igual que el primer entrevistado, la señora aseguró que ha tratado de impedir que los carretoneros continúen arrojando la basura pero también ha recibido una respuesta negativa a su petición.
Zona de infección
Por el puente a diario pasan trabajadores y vecinos para abordar las unidades de transporte público pero también menores de edad que se dirigen a las instituciones educativas de esa zona de ciudad.
Una madre de familia pidió la intervención del gobierno porque el foco de infección tiene en riesgo a decenas de niños que radican en ese lugar.
“Hay gente que tiene niños chiquitos y esto es un peligro de infección”, dijo.
Y es que a la basura regada en la extensión del canal, se le agrega que se depositan animales muertos, lo cual agudiza los olores fétidos que diariamente respiran las familias de esas colonias.
Al igual que el primer entrevistado, la señora aseguró que ha tratado de impedir que los carretoneros continúen arrojando la basura pero también ha recibido una respuesta negativa a su petición.