La participación ciudadana creció en un santiamén en Tamaulipas. De un efervescente 2014, donde surgieron y crecieron grupos de ciudadanos preocupados por la seguridad, el respeto al medio ambiente, a las garantías individuales, la apertura de espacios públicos, entre otros temas, al final del 2015 sus voces se desvanecieron en el ruido político-electoral. Lo peor es que sus esfuerzos no han sido acompañados, en la mayoría de los casos, por los políticos tamaulipecos.
Varios ciudadanos pasaron del cómodo interior de sus casas a ocupar, con base en sustento científico o legal, un lugar en la vitrina pública. El año antepasado “Tamaulipas por la paz” clamó por la seguridad y la justicia en la entidad. Empero, la muerte de su líder Eduardo Cantú Elías y la creación del Observatorio Ciudadano Tampico-Madero-Altamira sepultó el reclamo vivo. En cambio, ahora el organismo creado por la clase empresarial solo produce estadísticas para la Iniciativa Privada. La declaraciones públicas pasaron al ámbito privado de las oficinas y llamadas. En este tema, los padres y madres que perdieron a sus hijos, como Guillermo Gutiérrez y Graciela Pérez, son las voces más fuertes.
Los activistas del medio ambiente y la ecología son los que aún pugnan contra diversos proyectos. Un ejemplo es el esfuerzo de Miriam Guberman, Hilda Gómez y Argelia Borboni para proteger el mangle de la laguna del Carpintero. El caso se encuentra en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, donde podría detonar jurisprudencia sobre el tema. De igual forma, los habitantes de los ejidos “La Joya” y “El Huizachal” trabajan para controlar la explotación minera del área protegida “Altas Cumbres”. Allí la empresa White Clays S.A. de C.V., de acuerdo a una investigación de los reporteros Ángel García y Raúl López fundamentada en el informe de la Universidad Autónoma de México (UAM), ha destruido piezas arqueológicas y fósiles con más de 10 mil años de antigüedad.
Dos de los temas que han despuntado son el matrimonio entre personas del mismo sexo y el otorgamiento de los servicios de salud a personas de la comunidad lésbico, gay, bisexual, transexual, travesti, transgénero e intersexual, (LGBTTTI) tamaulipeca. La presidenta de “Tamaulipas Diversidad Vidha Trans”, Ana Karen López Quintana, ha llevado jornadas de educación sexual a municipios y comunidades del norte veracruzano y sur tamaulipeco. El mes pasado viajó a Europa para participar en el proyecto para mejorar la atención de las y los trabajadores sexuales que padecen VIH.
Otro de los activistas que ha tomado fuerza es el representante en la entidad del movimiento “Matrimonio Igualitario”, Mercurios Espinoza del Ángel. Hasta ahora a través de la promoción de amparos ante del Poder Judicial de la Federación (PJF) se reconoció el derecho al matrimonio a 68 homosexuales del sur de la entidad. Hasta la fecha se han unido 4 parejas. En la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) se resolverá el amparo que ‘abra la puerta’ a las reformas de los artículos 124 del Código Civil y el 43 de la Ley Reglamentaria de las Oficinas del Registro Civil, mismo que permitirían las uniones legales entre parejas gay’s.
Sin embargo, los pocos o muchos ciudadanos que buscan, desde su perspectiva, ‘hacer el bien’ empiezan a confundirse. La apertura de las candidaturas independientes, con 62 aspirantes, y la postura de que solo desde un cargo público se “cambian las cosas” es engañosa. Esto mezclado con la sequía de cuadros en los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC) provocó que figuras empresariales y sociales fueran tentadas por los institutos. Algunos cayeron en las redes y otros no.
En la pasada elección a diputados federales, Eduardo Cantú mordió el polvo de la política partidista. Para este proceso, la aparición del ex presidente del Consejo Empresarial de Madero, José Andrés Zorrilla Moreno, ha sido motivo de sorpresa o ¿esa era su apuesta desde que tomó el mando de la cámara?. En poco tiempo Zorrilla Moreno puso en la agenda estatal la recuperación de la plaza Isauro Alfaro, el combate a la inseguridad y la atención a la playa Miramar. Ahora, ese peso ganado puede caer al fondo.
El empresario del ramo educativo debe tener claro que en México los políticos, todos, hasta los nuevos, son medidos con la misma vara.
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