CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Un aumento en accidentes viales, dolores de cabeza, trastornos alimenticios y otros males aquejan principalmente a los adultos mayores y adultos jóvenes en primera semana del horario de verano.
Las adaptaciones tardan debido a que el cuerpo humano y el de muchos seres vivos se rigen por ciclos circadianos, que se rigen por la cantidad de luz solar, la temperatura ambiental y el ruido.
Luis Carlos Ortega Tamez, neurólogo del Hospital de Alta Especialidad en Victoria, explica que los trastornos del sueño existen durante este cambio de horario, ya que el cuerpo humano está diseñado para funcionar con la luz solar.
Al llegar la noche baja la luz, la cantidad de ruido y el cuerpo baja también sus revoluciones en busca del descanso.
“Los ciclos circadianos, no los tiene sólo el ser humano, sino también los animales y las plantas, el mover y atrasar los horarios influyen de algún modo en ese ciclo. Lo vemos en las personas que vuelan de América a Europa y sufre el llamado “jet lag”, por la descompensación de horarios drásticos”.
Ortega Tamez, con especialidad en Neurología en Victoria, asegura que el cuerpo debe adaptarse en las primeras 48 horas al cambio de horario.
Sin embargo, esas primeras 48 horas suelen generar hasta gastos económicos debido a que la falta de horas de sueño ocasiona un mayor número de accidentes viales, deconcentración e irritabilidad.
“La falta de adaptación se resiente más por la edad, afecta más al adulto joven, el adulto maduro y el niño no lo resienten tanto. Se ha estudiado este fenómeno apenas hace 15 años, pero en Estados Unidos y Europa tiene muchos más años de aplicar estos cambios de horario y está documentada la mayor incidencia de accidentes, sobre todo en las primeras horas del día, ausentismo laboral, irritabilidad y depresión, que son efectos secundarios del horario de verano”, dice el doctor Luis Carlos Ortega Tamez.
Hoy el 20 por ciento de los adultos jóvenes en Victoria y las personas de tercera edad podrían estar padeciendo estos malestares que ocasiona el horario de verano.
Sin embrago, advierte el doctor Ortega Tamez que estos malestares no son graves, sino adaptativos y bastarán más de 48 horas como máximo para volver a la normalidad, basta intentar dormir a la hora habitual, no importa, si aún no siente sueño.
“Si de manera normal me daba sueño a las diez y ahora sentiré sueño a las once, debo intenar dormir a las diez y buscar el ambiente para descansar apagando televisión y teléfono. Los malestares podrían seguir unos dos días solamente, pero no hay efectos secundarios graves”.
Ahorros del horario de verano 2015
Con base en los estudios del Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE), con la participación Federal de Electricidad y el Instituto de Investigaciones Eléctricas la aplicación del
horario de verano en el año 2015 obtuvo ahorros en consumo de 1 mil 46.47 gigawatts hora, que podrían ser utilizados para abastecer 602 mil casas habitación durante un año.
Se obtuvo también una demanda evitada de 672 mesawatts que equivale a la capacidad instalada de la planta La Yesca, en Nayarit.
La cifra incuye los ahorros generados en 33 municipios fronterizos en el lado norte, que adoptan el horario de verano desde el segundo domingo del mes de marzo, al primer domingo del mes de noviembre, con el propósito de facilitar la vida de los habitantes de aquella zona.
En pesos el ahorro económico por la implementación del horario de verano en el año 2015 se estima en 1 mil 470 millones de pesos.
Y en términos ecológicos se evitó la emisión de dióxido de carbono a la atmósfera por 466 mil toneladas de este contaminante que produce el efecto invernadero.