28 diciembre, 2025

28 diciembre, 2025

Crónica urbana

Laredo, en el vértice del Tamaulipas

Crónica Urbana

Hasta ahora, Laredo ha sido el fin de la tierra donde comienza otro mundo. Cuando jóvenes atletas que competíamos con las tres grandes fuerzas deportivas, Laredo representaba la añoranza del destierro por su lejanía de ciudades equidistantes de Victoria, Reynosa, Matamoros y Tampico.

Pero el poderío estaba en dos centros capitales; Laredo y Tampico, que consentían a los mejores equipos deportivos. Los de Laredo impresionantes, excelentes uniformes, costosos y llamativos. Laredo por siempre fue la parte lejana del estado, y a pesar de las modernas carreteras llegar a Laredo es fletarse 11 horas por autobús desde Tampico y desde Victoria 7. Muchos kilómetros. Pero nos encontramos la ciudad más conocida de la frontera en el mundo y tal vez Tampico el puerto también.

Laredo es un territorio de trabajo, de gente que ha fluido sus esfuerzos entre México y los Estados Unidos. Allí se dan cita gente de todos lados y sus calles son un baluarte latino muy interesante, fusión de culturas de Centro y Sudamérica, que por las tonalidades de lenguaje se denuncian en su hablar.

Colorido de la calle Guerrero, a pesar de tiempos adversos, conglomerado de transeúntes, vagos, putitas y putitos, fritangueros y ambulantaje precoz. Sitios de taxis que se disputan el pasaje, merolicos, vendedores de ilusiones, cinturitas, mamones improvisados y mentadas de madre entre sonrisas de fruteros que fuman, toman cocas y se arremangan los güevos en la vía pública.

Laredo es un nido de alegrías, de gente que cruza todos los días a sus compras en Laredo, Texas y de gente que llega deportada o asustada por la vida americana.

Vagar en Laredo, sentir los olores de una casa que es nuestra, tamaulipeca donde la oposición no en pocas veces ha sentado sus reales, precisamente por el olvido en que lo postra el centro político.

Gracias por compartir la mesa con la pintora Bibi Zárate y su familia, gracias por contar con gentes como Rosa del Carmen, promotora cultural del CC Nuevo Laredo. Eso alegra, y conviene al ITCA, y las instituciones que respaldan el trabajo cultural.

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