Víctor Gutiérrez
CIUDAD MANTE, Tamaulipas.- .-Joven se dirigía a dejar quesos a un municipio vecino, cuando en el trayecto chocó contra un camión cañero, el cual estuvo a punto de aplastarlo.
El accidente fue reportado a las 10 de la mañana con cinco minutos en la estación de Bomberos, señalando como lugar el tramo carretero Mante-El Limón, a la altura del Motel Diamante.
Personal de urgencias básicas de la dependencia se trasladó al sitio a bordo de la unidad 021 para brindar la atención a Genaro Ramírez Cervantes, de 25 años de edad, con domicilio en calle Emiliano Zapata, de la colonia Vicente Guerrero.
De acuerdo a los datos recabados en el sitio, el joven se dedica a repartir quesos y se dirigía al municipio de Ocampo, para lo cual se trasladaba a bordo de una motocicleta marca Itálika FT150, color rojo, sin placa de circulación.
Tras haber pasado el mencionado motel chocó contra la parte posterior de un camión cañero de la marca Dodge 500, con placas de circulación WJ66838 de Tamaulipas, el cual avanzaba de reversa sobre el carril de baja velocidad.
«Voy por aquel carril, delante de mí iba una camioneta y por no querer rebasarla, me paso para este lado (carril de baja velocidad). Veo el camión que viene de reversa y me alcanzo a detener. Le pité para que parara, pero no se detuvo. Alcance a brincar y él se llevó la moto en rastra», manifestó el motociclista al oficial de la Policía Federal, División Caminos.
Mientras tanto el conductor del camión, Martín Medrano Acuña, de 58 años de edad, residente de la calle Burgos en la colonia Victoria, sólo señaló que el renegado se había estrellado con su unidad.
La motocicleta terminó debajo de la pesada unidad, la cual fue arrastrada un par de metros, y su tripulantes sólo sufrió algunos golpes que no ameritaron su traslado a un hospital.
Tras hablar con los involucrados, el oficial federal refirió al motociclista que la responsabilidad recaía sobre él, toda vez que los indicios dejaban ver que se desplazaba con exceso de velocidad y que no respetó la distancia necesaria entre vehículos.
Para evitar mayores problemas con la autoridad, el dueño del camión y el repartidor, optaron por dialogar y llegar a un acuerdo en cuanto a la reparación de los daños de la motocicleta.
