CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Aunque Pepe Treviño se escude en las formas de juego, Correcaminos anoche tuvo además una dosis de actitud que le valió romper la maldición de 91 días sin triunfo y sin gol en casa para vencer al son de 3-1 a Coras de Tepic y mantener la llama encendida con la esperanza de calificar a la liguilla del Clausura 2016.
Fue una noche de sorpresas, momentos inesperados como un doblete de Ever Guzmán que al 26 y al 33 ya tenía al ave arriba; Román Rubilio Castillo cerró la cuenta al ’90 y por Tepic, Sergio Quiroz había acortado distancias al ’78.
Con esta victoria, los de la UAT requieren que esta tarde Celaya gane en su visita a Oaxaca, pues un triunfo de los Alebrijes acabará con la fiesta naranja que empezó anoche y que sus aficionados buscan se prolongue en la liguilla por el título.
Correcaminos pudo haber calificado anoche mismo, pero Atlante se quedó corto en la búsqueda de la remontada pues cuando iba abajo 0-2 en casa frente a Mineros, alcanzó la igualada y estuvo a un tanto del triunfo y darle por automático el pase a Correcaminos, pues si los zacatecanos no sumaban, el conjunto cuerudo ganaba uno de los dos boletos restantes.
Por eso hoy todas las miradas victorenses estarán puestas en la cancha del nuevo estadio de Oaxaca a las 17:00 horas, cruzando los dedos por un triunfo cajetero.
Sobre el partido, Correcaminos mostró aspectos que los 1970 aficionados que ingresaron anoche al Olímpico Victoria agradecieron, pues de los siete partidos como local, muy pocas veces se vieron las amígdalas que anoche mostraron en un gran lapso de juego.
Mención aparte merece Daniel Vogel que al menos en cuatro ocasiones se vistió de héroe mostrando reflejos y seguridad que sellaron la victoria de los emplumados.
En pleno arranque de juego Armando González y Carlos Esparza dentro del área dispararon y remataron, respectivamente y el cancerbero victorense evitó la caída de su marco.
Fue al ’26 cuando el de Moroleón, Guanajuato, Ever Guzmán, marcó el primero de la noche y su tercer tanto del torneo gracias a un pase de Juan Pablo Meza que tuvo una noche inspirada, mandó pase al “Cheno” y éste disparó con parte interna para vencer la meta de Luis García.
Siete minutos más tarde fue Ricardo Bocanegra quien en una jugada viril salió avante con el esférico ante la férrea marca contraria y elevó el esférico para que de cabeza, Guzmán lograra el 2-0.
Para la complementaria, José Sigifredo Mercado dispuso el ingreso del hondureño Rubilio Castillo para que saliera el autor de los dos tantos; Correcaminos perdió terreno pues prácticamente arriba ‘Roruca’ peleaba solo contra el mundo.
Así, Hernán Crispante adelantó líneas pero Daniel Vogel en una noche memorable sacaba prácticamente todo lo que le venía.
Fue al minuto ’78 cuando el juego tomó tintes de dramatismo; Coras volcado al frente por todos los medios, logró sacar un centro por conducto de José Peralta desde la banda derecha, Vogel sale por aire pero en su camino se encuentra a su compañero Jhonny Leverón provocando el choque y la confusión, dejando el esférico a merced de Sergio Quiroz que hizo el 2-1.
Los nervios estaban de punta pues Coras estaba encima y Correcaminos esperando una oportunidad para descolgar.
Al toma y daca jugaban ambos equipos cuando llegó el contragolpe de la UAT cuando iniciaba el tiempo de reposición señalado por el silbante Oscar Mejía; Correcaminos atacó con tres y Nayarit lo hacia con un defensa más el portero, Bocanegra encaró ante la salida del arquero y la marca de un central, fintó para sacar pase en lugar de tiro y solo con marco abierto, Rubilio Castillo hizo el 3-1 definitivo, aunque con un festejo falto de humildad, poniéndose las manos en los oídos en señal de reclamo a la afición, pues el gol aunque valió el triunfo, no representará nada si Alebrijes gana hoy.
La afición festejó y por los aires voló cerveza, se alzaron los brazos y en Sol General norte, Jimmy lanzó de regalo semillas a la tribuna para enmarcar la victoria.
Hoy las horas correrán lentas para los aficionados, cuerpo técnico y jugadores de Correcaminos, todos atentos al televisor a las cinco de la tarde y con la camiseta del Celaya puesta en el corazón, pues el equipo donde jugara hace 20 años Hugo Sánchez y ‘El Buitre’ Butragueño, podría darle hoy el pase a Correcaminos a una liguilla, quien sabe si merecida, pero si necesaria para una afición maltratada por el fútbol.