Dice Tadeuz Kantor, «hay que crear y destruir».
Significa que hay atreverse a cambiar.
El admirable poeta, escritor, pintor, escultor y cineasta lo conocí en la Galería Nacional de Roma en 1978.
En una gran exposición que abarcó todas las salas.
El arte es un transformador del universo cotidiano.
Crea otra naturaleza como nos dice Erick Fromm.
Asumir el papel del artista como creador es una provocación.
El arte disturbia, convoca, esclarece los sentidos es un placer, a veces agudo, divergente, que multiplica los sentidos. El arte va más allá del hombre porque el hombre nunca deja de soñar.
Ciertamente dice Gabriel Celaya: «el arte no destruye tiranías».
Soy una artista que ama lo imposible.
Y como el Dante, «es el amor el que me hace hablar» por encima de mis defectos y virtudes.
Creo en el arte y la potencia de la creación tanto como el amor que provoca y las vanidades transitorias.
El arte me hace mirar al mundo y como dice Pascal, «hay razones del corazón que la razón no conoce».
Y parafraseando a Fromm: «Hay que tener coraje para vencer el miedo» en el arte. Es la humildad de la autocrítica.
Aunque, me sea imposible a veces sustraerme a mis vanidades, porque soy ciego como un murciélago.
E invento poemas y cosas en la tela.
Con el instinto humano de entregar
Mi corazón.
Nota:
Tadeuz Kantor. El polaco de la obra de teatro La Clase Muerta y de grandes filmes. Lo conocí en Roma.
