CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Desde el pasado mes de agosto, más de 500 mil habitantes de municipios rurales viven en la indefensión y a merced de la delincuencia, luego del retiro de casi 3 mil polimilitares que estaban a cargo de la vigilancia en estas zonas, afirmaron dirigentes campesinos.
En Aldama y Altamira, la gente del campo, cansada de robos y amenazas de delincuentes, ya han creado grupos para vigilar parcelas y algunas comunidades.
En municipios como Güémez, Padilla, Casas, San Carlos, San Nicolás, Tula, Miquihuana, Bustamante, son los más afectados por falta de vigilancia policial, por lo que se han incrementado los robos de ganado, equipo de labranza y de viviendas.
Manuel Lara Martínez, líder de la coordinadora nacional Plan de Ayala, señala que la delincuencia es uno de los principales problemas que afectan al campo, por lo que causa pérdidas económicas importantes que no se pueden recuperar.
«En el campo se carece de seguridad, ya que desde la desaparición de la Policía Rural, no ha existido ninguna corporación que vigile los caminos, brechas, ejidos y municipios rurales del estado».
Afirman que Tamaulipas es el paraíso para los ladrones de ganado, quienes con toda impunidad trabajan, ya que saben que no hay autoridad que pueda frenar sus actividades delictivas.
«Ante esto los campesinos vamos a salir a la calle y realizar una marcha para exigir al gobierno federal que se ponga a trabajar».
Destacó que en municipios del sur del estado como Aldama y Altamira, los campesinos empezaron a organizarse para formar grupos de vigilancia y cuidar sus tierras y ganado.
Güémez, Padilla y Casas sólo tienen 7 patrullas
Después de la salida de militares de 34 mil 102 habitantes de los municipios rurales de Güémez, Padilla y Casas, registraron un incremento en el nivel de inseguridad, por lo que urge reforzar la vigilancia, debido al incremento en robos domiciliarios, de herramientas en el campo y de ganado, luego que los tres municipios son cuidados con apenas 7 patrullas y poco más de 50 agentes.
Sólo en el municipio de Güémez, existe una población de 15 mil 659 que tiene dos patrullas de la Policía Estatal para vigilar todo el municipio, situación similar existe en Padilla y Casas.
Representantes campesinos han solicitado a las autoridades municipales que exijan al Estado que se incremente la seguridad.
Rosendo Padilla, campesino de Güémez, dijo que desde que se fueron los militares, sólo se quedó la Policía Estatal, la cual se encarga de la vigilancia, pero no es suficiente, ya que sólo cuenta con dos patrullas y cerca de 14 elementos para resguardar el municipio».
En Padilla, donde existe una población de 14 mil 020 habitantes, según el Instituto Nacional de Estadística (INEGI), los ciudadanos señalan que es urgente que por parte de la Secretaría de Seguridad Pública, se refuerce la vigilancia policial en este municipio, luego que los elementos del Ejército que resguardaban el poblado, se fueron y no han regresado.
El comerciante Francisco Rodríguez, comentó que los robos en la cabecera municipal se han incrementado, desde que se fueron los soldados.
«Actualmente sólo se cuenta con la Policía Estatal, pero tienen tres patrullas que no son suficientes para cubrir toda la población, luego de que dos están en la cabecera y otra en el Barretal, que son los poblados más importantes del municipio.
En Villa de Casas la situación es similar, luego de que sólo se cuenta con dos patrullas con 15 elementos en la Delegación de Seguridad, los cuales se encargan de cuidar a los 4 mil 423 habitantes de este municipio.
el dato
Municipios sin vigilancia
Aldama
Altamira
Güémez
Padilla
Casas
San Carlos
San Nicolás
Tula
Miquihuana
Bustamante




