En varias ocasiones me he preguntado el porqué el gobierno como el comercio siempre nos dan la nada agradable noticia de año nuevo que van aumentar los impuestos y los precios de la canasta básica como las refacciones cuando muy seguido lo hacen durante el año que dejaron atrás y no necesariamente tuvo que ser un nuevo año.
De plano creo que lo hacen con el propósito de amargarnos la vida o es una vieja costumbre que ignoro quien la implantó y cuando pero el caso es que llegó para quedarse.
Antes de perdido avisaban con quince días de anticipación, después cada semana y ahora nos la dejan caer a quemarropa.
Es más la secretaría de Comercio y del consumidor mandaba a sus inspectores a checar los comercios o a informar de los aumentos para invitarlos a instalar dentro del comercio la lista de los nuevos precios o recibían quejas del consumidor en contra de tal o cual comerciante que se atrevía a abusar de los precios pero hoy ni eso hacen.
De esos viejos tiempos recordamos cuando el Licenciado Tito Reséndez Treviño era Delegado Federal del Comercio y un buen día llegamos hasta él, Luis González Balboa y un servidor a solicitarles nos extendiera por escrito un nombramiento honorifico como inspectores para ayudarlo con Llera´
Tito nos lo entregó y principiamos a trabajar la plaza.
Al principio el comerciante no creía en nosotros e incluso se burlaban pero cuando vieron que la cosa iba en serio y multamos a varios comenzaron a vernos con respeto frenándose así el abuso del comercio.
Por supuesto que siendo Llera un pueblo chico la mayoría de los comerciantes dejaron de hablarnos pero eso nos importó poco y seguimos adelante con nuestro cometido al grado que los abusos se acabaron, los precios oficiales no solo se respetaron sino que obligamos al comercio para que colocara la lista de precios oficiales en una parte visible del comercio para que el consumidor los viera y reportaran ante nosotros a quien se pasara de la raya.
Huelga decir que se logró en aquellos años no solo controlar los precios sino que también el comerciante se hizo más humano con el consumidor.
Desafortunadamente Tito dejó de ser Delegado de Comercio en Tamaulipas y nuestra aventura llegó a su fin.
El abusivo comerciante revivió y las cosas regresaron a su anterior nivel siendo entonces cuando la gente nos buscaba para reportarnos algunos abusos pero les hacíamos saber que todo había terminado pero bien podían canalizar sus quejas ante la secretaría del ramo.
Ya no lo hicieron pues por un lado tenían miedo a hacerlo y por otro lado por falta de dinero se les hacía difícil ir a la ciudad capital a reportarlos.
Hemos traído al recuerdo lo anterior porque entendemos que se requiere que la secretaría del ramo se apoye en la población civil para imponer la lista de precios oficiales en apoyo a la población civil pero tal parece que a esta dependencia le falta voluntad para hacerlo o de plano les vale “guanga” la situación.
Aun así creemos que se puede hacer lo que en un tiempo ya se hizo pero pregunto: ¿Quién se animaría a ponerle el cascabel al gato?
HASTA MAÑANA Y BUENA SUERTE