CIUDAD MANTE, TAMAULIPAS.- Durante el 2018, el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA), ha cobrado la vida de tres personas y fue detectado en seis pacientes más, que se suman a una lista de más de medio centenar de personas en tratamiento por este mal, en Mante y la región.
El responsable del programa de VIH-SIDA, dijo que constantemente realizan detecciones y, la población responde, al aceptar realizársela, efectuándose en un solo día hasta 20 pruebas.
Explicó que en lo que va del año, los registros de la enfermedad han sumado seis ingresos y con estos, se tiene bajo tratamiento a alrededor de 60 personas, cifra que ha permanecido los últimos años.
“Van tres defunciones en lo que va del año, todas fueron de hombres con este padecimiento y nosotros insistimos en que si existe alguna sospecha de la enfermedad, se realicen la prueba, porque lamentablemente la mayoría de quienes mueren, es porque iniciaron un tratamiento en etapa tardía o abandonaron el tratamiento”, dijo.
Agregó que la esperanza de vida para un paciente con VIH-SIDA, puede ser incluso mayor que la de personas con distintas enfermedades crónicas, como es el caso de la diabetes mellitus o hipertensión.
Dijo que la labor de la Secretaría de Salud, va más allá de solo otorgarles medicamentos, pues a los pacientes se les da seguimiento, en caso de que migren por cualquier motivo.
“Nosotros insistimos a los pacientes, que a pesar de tener este padecimiento, deben cuidarse, porque tenemos datos incluso de personas que desde hace tres décadas tienen la enfermedad y su calidad de vida es excelente””, afirmó.