El día llegó, para muchos la incertidumbre es cada día más pesada y, para otros (minoría siempre), el cambio es motivo de regocijo. Sus nuevas esperanzas están centradas en un viejo personaje, en el que han depositado toda su confianza, porque no les queda más.
El sistema político en México ha tenido fallas consistentes y permanentes que han creado en la población tal rechazo que ahora los lleva a pensar que, después de sufrir al PRI y probar con el PAN, quien tampoco logró satisfacerlos, y tras un turbulento regreso con el Tricolor, es el Movimiento de Regeneración Nacional encabezado por ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, la vía por la cual alcanzarán la prosperidad.
Debo decir que en lo personal soy un sujeto positivo, al menos esa percepción propia tengo, lamentablemente no creo que AMLO será ese extraordinario líder que necesita el país, pero sobretodo los mexicanos, para salir del hoyo en que estamos.
Y mi actitud creo está fundada, en la historia de nuestro país nunca habíamos tenido un personaje tan incoherente y cuestionado, pero tampoco uno tan defendido por sus seguidores, que aunque no sepan de qué están hablando y menos lo que su líder dice, lo siguen sin reparo, uno que otro enterado sí se salva.
Es “tradición” o “costumbre” que un político en campaña asegure que conoce el camino hacia la prosperidad, y hasta firme ante notario compromisos puntuales que pavimentarían esa ruta, sin embargo ya en el ejercicio del poder, se pierden, no pueden, o no les alcanza (el presupuesto digamos lo menos) para mínimo, trazar una vía recta al éxito.
Pero LÓPEZ OBRADOR supera todos los antecedentes.
Por protocolo o por respeto, los anteriores Presidentes electos perfeccionaban sus proyectos y armaban sus equipos de trabajo manejando un bajo perfil, escapando un poco de la escena pública para entrar con fuerza el primer día de su administración. Sin embargo, en esta ocasión el proyecto renovador no luce así, tras la elección ANDRÉS MANUEL se ha dedicado a “trabajar” sin descanso, provocado una sobre exposición que ha revelado que sus promesas de campaña no se parecerán a su proyecto de nación.
Antes y durante el proceso político aseguró que desde el primer día de su administración acabaría la corrupción, bajaría el precio de los energéticos y regresaría a las fuerzas federales a sus cuarteles, pero no lo puede cumplir, hoy México no es diferente, no tiene mejor economía y no es más seguro.
VICENTE FOX y muchos otros en su momento, habían asegurado que tenían soluciones de 5 minutos para problemas que al cabo de 6 años no lograron concretar, caso para poner como ejemplo el EZLN, simplemente no pudo, historias así son muchas y de muchos.
Un cambio sexenal siempre genera muchas expectativas, pero este se destaca por provocar incertidumbre, este trajín del Presidente electo, sus dichos y sus posturas un tanto utópicas, ha hecho que líderes de los sectores productivos en México no entiendan cómo es que en realidad hará las cosas, cuánto afectará a su economía y por tanto a la de todos los mexicanos, pues si al patrón le pegan en el bolsillo, al empleado es al que le duele.
Sí es preocupante, México es uno de los mercados emergentes más atractivos de 2018, de acuerdo con un análisis realizado por Bloomber, nuestro país y Turquía están en la punta de las 20 economías en desarrollo, superando incluso a las asiáticas, es por ello que la incertidumbre de los poderosos sigue creciendo.
Y su muy particular forma de llegar a dar manotazo, desde antes de tomar protesta, genera más preocupaciones, si no lo cree basta ver cómo sin ser Presidente, ya realizó dos “consultas ciudadanas”, improvisadas, fuera de todo protocolo y sin validez legal, pero que le han servido para tumbar el Aeropuerto de Texcoco con todos los millones invertidos y para imponer el Tren Maya pese al daño ecológico en la selva.
Por esas decisiones, además de la turbulencia en el país, los mercados internacionales han visto cómo LÓPEZ OBRADOR sin titubeos se impone, sin tomar en cuenta el comportamiento de las bolsas de valores y cuánto afecta con ello a México. El mercado mexicano tenía ganancias de cerca del 10% hasta octubre, pero la cancelación del NAIM inició el descenso que arrojó números rojos en el sexenio. Al final el balance sexenal de la Bolsa Mexicana de Valores durante la gestión de EPN es negativo. Temas profundos, no ahondemos más.
AMLO inicia su administración con muchas voces en su contra, pues aunque se llevó cerca del 50% de los votos, sólo sufragó el 60% de los electores, visto así, sólo el 30% de los mexicanos en realidad fueron a las urnas a apoyarlo.
Este es un día histórico para México y sólo nos queda dar nuestro mejor esfuerzo, ser buenos mexicanos, ciudadanos productivos, una sociedad exigente y buscar fortalecernos. No es conformismo, es esperanza; no es negatividad, es mi percepción.
Es una realidad que lo que se prometió en campaña no se puede cumplir, veremos qué pasa y cómo lo hace.
QUÉ CURIOSO
Hoy México inicia una nueva etapa, empieza a escribir una nueva historia. México es muy particular y no será como otros países, tendrá su propio relato, pero dejo como referencia cosas del pasado que desplomaron el futuro de otros, sea esta una forma de tenerlo en mente y no permitir que nos den el mismo final.
Comandante supremo = Mesías tropical; Revolución = Cuarta transformación;
El imperio o la oligarquía = La mafia del poder.
No es mio, lo leí.
@Omar_Reyes
omarereyes@gmail.com