Pueblo Viejo.- La iniciativa para castrar mediante métodos químicos a violadores, es un tema que se debe analizar a fondo por todo el contexto que lo integra y en el cual el delincuente que incurrió en el delito sería condenado de por vida a traumas físicos por lo que se debe apostar por más años de cárcel.
Al respecto de la iniciativa propuesta por el senador Alejandro Armenta de Morena, el titular de la Procuraduría de la Defensa del Menor del Sistema DIF Municipal licenciado Gustavo Vargas Trujillo, destacó que este es un tema espinoso y complejo que no se debe tomar a la ligera porque al final el infractor es una persona y por más grave que sea el delito no se le puede condenar a un castigo de este tipo ya que se generaría en él un resentimiento hacia la sociedad y podría delinquir nuevamente.
Manifestó que antes deben de analizarse detalladamente los daños psicológicos y físicos que ocasionarían a quien cometió la falta, dijo que de por sí el delito de violación se castiga severamente, lo conducente sería alargar la condena al inculpado, pero que esta se cumpla realmente y no se dé lugar a la terrible impunidad que ensombrece el sistema de justicia.
Señaló que los legisladores, deberían de someter a juicio la propuesta de su homólogo, pues el tema de la violación, es un tema bastante “espinoso”, y de la noche a la mañana no debe de aprobarse, ya que el delincuente terminaría padeciendo traumas físicos y psicológicos contra la persona y obvio se daría la intervención directa de Derechos Humanos, pero por otra partes están las víctimas a las que se les debe dar justicia y que el responsable pague y no se dé lugar a la impunidad.