Aunque en el discurso ayer y antier el presidente Andrés Manuel López Obrador, repetía que se corregiría el error en la presentación del Presupuesto 2019 que quitaba miles de millones a las universidades publicas del país, la realidad es que el mandatario tuvo que ceder ante la presión de las propias instituciones y del rechazo casi unánime de organismos no gubernamentales y de las ‘benditas redes sociales’.
Así es mis queridos boes, ha quedado claro una vez más el poder de la opinión pública en todas sus presentaciones y, que aún el casi ‘iluminado’ inquilino del Palacio Nacional, ha tenido que doblarse y dar marcha atrás al recorte a la UNAM, IPN, UAM y demás universidades.
“Se cometió un error en la presentación del Presupuesto, porque hice un compromiso público de que no se iba a reducir el presupuesto de las universidades y se presentó un Presupuesto en donde, en efecto, hay una disminución de 4 o 5 mil millones de pesos al presupuesto de las universidades públicas”, dijo tras la retahíla de críticas porque una vez más no cumplía con su promesa de campaña, de no disminuir el presupuesto a educación.
“sostengo que se va a reparar ese error y se le va a entregar a las universidades lo que les corresponde, lo que acordamos”.
Claro que un día antes, cuando todavía no sentía el rigor de la crítica y del apabullante reclamo de las redes, López Obrador arremetía contra la UNAM, que ya había protestado en una carta a la opinión pública:
“No tengo conocimiento sobre el comunicado de la UNAM”, dijo López Obrador al respecto de la queja de la Universidad Nacional… que sí puedo decir, que en general es que se va hacer más con menos, porque se acaba la corrupción y se acaba el derroche y va a rendir el presupuesto (…) Van a haber mucho más recurso que antes. Y aclaro, tiene que rendir más el presupuesto, porque deben terminarse los lujos. Tiene que haber austeridad”.
Es decir, no es que se haya cometido un simple error en la presentación del presupuesto, se trataba de una decisión de minar el presupuesto a las universidades, porque seguro con ello se pretendía financiar a las 100 universidades de AMLO que se supone estarán funcionando este 2019.
Y hago esta reflexión, para ejemplificar la eficacia de la crítica, esa que tanto escozor causa a los fanáticos del máximo líder de la ‘4T’.
El Presidente ha dicho que cuando se cometa un error, su administración no tendrá reparo en reconsiderar, lo que de alguna manera es una buena señal, no es necesario siquiera que reconozca que ha sido la crítica de la sociedad que no votó por el y algunos que despiertan del sueño los que le han obligado.
Ojalá que haya más botones de muestra, como para creerle que reconsidera, porque el caso del NAIM cuya cancelación (aunque se sigue contrayendo) ya le ha costado al país más de 5 mil millones de dólares y contando, sería una buena oportunidad para que si quede bien claro que es capaz de enmendar errores.
Por lo pronto, desde este espacio una vez más defiendo no solo el derecho a disentir de la fanaticada de AMLO, sino la obligación de señalar lo que está mal de la administración que encabeza, máxime ahora que nos damos cuenta que si es posible hacerlo entrar en razón.
¿Y por qué no dices las cosas buenas?, (supongo que dirán los ‘AMLOvers’), bueno pues es que creo que con los miles de millones de pesos que López Obrador se gastará en comunicación, bastará para que todo lo bueno que haga se difunda en los canales de la ex ‘mafia del poder’.
No, no crean que es cuento, échenle un vistazo al presupuesto y verán que el señor presidente vuelve a faltar a su palabra de no gastar en publicitarse, porque resulta que pretender gastarse 53 por ciento más de lo que se gastó Enrique Peña Nieto este año.
La partida 3600 (destinada a los servicios de comunicación social y publicidad en el Presupuesto 2019) pasaría de 2 mil 338.6 millones a 3 mil 579.45 millones de pesos, es decir, mil 240.82 millones adicionales. ¿Qué tal?!
Por eso amigos, la crítica es sana, tan sana que ha logrado corregir al menos una de las pretensiones equivocadas del gobierno de AMLO, ojalá que la crítica objetiva se multiplique y los ciudadanos seamos el contrapeso de este gobierno que en el Poder Legislativo tiene k a mayoría que le sirve de ‘tapete’ y en el Judicial a un poder al que simplemente ha minado desde la campaña.
El PRI y Tampico…
El martes Don Roberto González Barba rindió protesta como dirigente (líder es otra cosa) del PRI en Tampico, lo hizo ante la dirigente estatal (repito el paréntesis) Yahleel Abdala y, según las gráficas, unos pocos priistas.
González Barba sabe a lo que va, sabe que llega a la dirigencia de un partido al que los suyos lo han abandonado, ahora que no tiene huesos que repartir, ahora que los presupuestos están en manos azules y morenas, hijos mal agradecidos y eso le convierte en un héroe tricolor sin capa, un ‘loco’ que de lo que si puede presumir es de lealtad y congruencia.
La lección para el PRI estatal, es esa fotografía, la del partido casi solo, donde eventos que antes eran de multitudes, ahora son menos concurridos que el velorio de un no identificado
Comentarios:
meliton-garcia@hotmail.com
Twitter: @melitong