Inmersos en los días de reflexión, el recuento de los daños y el planteamiento de nuevas metas para un nuevo ciclo, a todos nos invade la nostalgia por los tiempos idos, para el club de los optimistas, siempre el mañana serán de tiempos mejores, pero para el grueso de los mexicanos es, otra vez, un panorama incierto, como en cada fin de sexenio de todas la épocas políticas de esta patria.
Como regalo previo a la navidad se anunció, por partes, con errores y correcciones, el presupuesto de la federación para el año venidero, fuera del salario mínimo, todo fueron malas noticias, para la educación, para la cultura, para la ciencia, para las mujeres, para salud, entre más rubros que sufren los recortes, las reacciones no se hicieron esperar y ya hablaron políticos, economistas, académicos y hasta los artistas que en su momento prestaron su imagen para convencer del cambio al electorado, arrepentidos vuelven para hacer un llamado a la cordura del presidente y sus estrategas.
Como DIEGO LUNA y GAEL GARCÍA, muchos convencidos de que el PRI y el PAN ya no eran opción, se casaron con las ideas del “necio” que juró combatir la corrupción, pero ya todo mundo se está desencantando, van apenas 20 días de este gobierno y nada cuadra, los políticos viejos, que son ahora los funcionarios nuevos, no dan pie con bola, teniendo 6 meses para la preparación, siguen dando tumbos por aquí y por allá, en cualquier tema que tocan, ya sea aeropuerto, tren, presupuesto, seguridad, universidades, gobernanza o administración.
Y mientras que para muchas estas épocas son de días de guardar, de atender la familia y estar en paz, otros tienen que estar alzando la voz y dar la cara para detener los absurdos que se plantean para las nuevas políticas públicas. Así tomó fuerza esta semana el movimiento de feministas de colectivos de la CDMX que presentaron su rechazo al presupuesto 2019 ante la Comisión de Igualdad de Género.
“No sin nosotras” y “ni un paso atrás” son las consignas firmadas por cerca de cinco mil mujeres de agrupadas en más de 300 organizaciones de todo el país, las defensoras de los derechos de las mujeres consideran grave la cancelación del Programa de Apoyo a Instancias de Mujeres de las entidades, y la reducción del 25 por ciento del presupuesto a la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las mujeres y la reducción del 50 por ciento de presupuesto al Programa de Igualdad para la sociedad civil. Les preocupa también la desaparición del Fondo de Coinversión para la Sociedad Civil.
La justificación actual para borrar los apoyos a las asociaciones civiles, es el mal manejo de las administraciones anteriores, pero es un golpe bajo a los colectivos ciudadanos, porque de estos programas salieron iniciativas de políticas públicas que hoy son una realidad y se fortalecieron acciones ciudadanas en favor los temas de género.
Los colectivos que gritaron albricias con la llegada del nuevo presidente, están exigiendo ahora que se reconsidere el presupuesto destinado a la causa civil en favor de mujeres y niñas violentadas, en atención a mujeres indígenas, campesinas, rurales y en cualquier situación de vulnerabilidad.
En Boca Cerrada
En temas locales, siguiendo la línea política nacional, el ayuntamiento victorense reconoce que solo diez por ciento de calles pavimentadas podrían considerarse en buen estado, el 90 por ciento de los caminos urbanos están desechos, el reconocimiento es el inicio para la solución del problema, pero también deberían llamar a cuentas a los anteriores administradores, que muy orondos se fueron cacareando obras viales y de pavimento como si fueran reales.
@LupitaEscobedoConde
