MÉXICO. Luego de trabajar durante años en relación de dependencia, muchos deciden emprender un negocio propio que les brinde la independencia que tanto ansían. Si bien la experiencia adquirida les puede otorgar conocimientos útiles, no los prepara del todo para montar un comercio propio. Si deseas emprender pero te sientes algo inseguro por no contar con la preparación adecuada, a continuación te presentamos algunos consejos para que te animes a dar el salto.
1. Investiga el mercado
Una vez que sepas qué tipo de producto o servicio ofrecerás, debes dedicar tiempo para realizar un estudio de mercado en donde quieres insertar tu negocio. Es muy importante tener en claro cuál es la necesidad en la zona y en el rubro. Una buena idea es buscar en Google palabras clave que estén relacionadas con tu industria, sin desanimarte si el mercado parece repleto, ya que esto puede ser una ventaja: significa que está funcionando para muchas personas y que puedes hacerlo funcionar para ti.
2. Establece tu presupuesto y busca financiamiento
Primero que nada, deberías investigar sobre los costos estándar que tienen la mayoría de las empresas dedicadas al área en la que pretendes desempeñarte. Una vez que sepas cuánto dinero necesitarás para comenzar tu negocio y tengas en claro cuál es tu monto disponible, es recomendable que busques la forma de financiar aquello que no llegas a cubrir con tus ahorros. Buscar inversionistas y pedir créditos son las opciones más factibles. Si eliges la primera opción, deberás dedicar tiempo para encontrar una persona que comparta tu idea y con la cual sepas que puedes trabajar amenamente. Si te inclinas por la segunda opción, ten en cuenta que existen muchos préstamos sin recibo de sueldo, muy fáciles de obtener.
3. Mantén los precios bajos
Cuando recién se inicia un negocio, lo más recomendable es que los precios se mantengan bajos para atraer a los clientes. Es fundamental que, como emprendedor, encuentres formas creativas de sostener los productos o servicios que ofrezcas lo más baratos posible. Más importante que la cantidad de dinero, es mantener el flujo de caja positivo. Teniendo una investigación de mercado previa, podrás ofrecer tus productos o servicios teniendo en cuenta la oferta de parte de la competencia y hacer un diferencial en la relación precio y calidad.
4. Ten presencia en la web
En la actualidad, es prácticamente imposible imaginar un negocio que no cuente con un sitio web propio. Por eso, te recomendamos que compres un dominio y te asegures de que tus clientes puedan contactarse contigo. Las redes sociales pueden ser las aliadas perfectas para las empresas que recién se están iniciando. Procura tener una fuerte presencia digital y utiliza todos los canales posibles, como Facebook, Twitter e Instagram, entre otros.
5. Encuentra un un buen equipo de trabajo
Estar rodeado de personas positivas con visión de futuro, es esencial al momento de dar un paso tan importante como la creación de tu propio negocio. Es preciso que sepas que no vas a poder hacer todo tú solo, va a llegar un momento en el que vas a necesitar delegar tareas. Conforma un equipo de personas en las que puedas confiar, que sean eficientes y compartan tu visión y metas.