He leído y escuchado por varios frentes la versión del pacto entre Eugenio Hernández Flores y las huestes de MORENA, de cara al proceso electoral que ya se vive en Tamaulipas; no me asombra, más bien me resulta contradictorio, si es que existe el acuerdo.
Así es mis queridos boes, la especie señala que el ex gobernador priista, a través de su familia y el apoyo de Ricardo Monreal habría acordado que su caso fuera incluido entre los ‘presos políticos’ por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que eso le permitirá salir pronto y a cambio él hará crecer y ganar a MORENA el 2 de
junio.
Tengo mis reservas sobre que exista ya un acuerdo, no de que Geño a través de sus hermanas lo haya buscado, claro que su familia y el propio ex gobernador tienen derecho a buscar por todas las vías su liberación, lo que le hace ruido es que allá, en las grandes ligas, los dueños casi absolutos del poder Federal hayan aceptado, si que lo hicieron.
No me extraña que Hernández Flores acepte tratos que en teoría le pondrían como un traidor hacia el PRI que lo hizo gobernador, no, si recordamos que en el 2006 en la cúspide de su poder en Tamaulipas operó para que los priistas locales votaran por el candidato del PAN a la presidencia, en ese entonces Felipe Calderón.
No es una suposición, todos escuchamos la grabación en la que
aparecía la voz de Geño pactando con Elba Esther Gordillo que el voto fuera contra Roberto Madrazo candidato del PRI.
Y ahí viene lo contradictorio del pacto Geño-MORENA, porque dicha
grabación, la hizo pública ni más ni menos que Andrés Manuel López Obrador en uno de sus mítines a zócalo casi lleno en el ex DF cuando se proclamó presidente legítimo.
Geño era puesto por el ahora Presidente de la República como parte de la mafia del poder, como uno de los gobernadores que ayudó a Calderón a que presuntamente le robaran la presidencia ese año.
Esa parte me deja tremenda duda de que el tabasqueño acepte declarar a Hernández Flores como preso político y entonces lo libere, pero mis dudas se incrementan cuando volteo a ver los números que trae el PRI en Tamaulipas, mismo al que solo le falta la declararía de muerte para sepultarlo.
Peor aún, han pasado más de 8 años de que Geño dejó el poder, años en que fue defenestrado por sus propios correligionarios, que en principio ya obedecían, por conveniencia a Egidio Torre Cantú y no pocos lo enlistaban entre los sospechosos del complot que terminó con la muerta de Rodolfo Torre, apestaba entre los suyos pues.
Pero en los últimos dos años y sobre todo entre octubre del 2018 y para acá, la imagen de Geño aterrizó de golpe en el suelo, fue encarcelado primero en Victoria y ahora en un penal Federal a la espera de que se resuelva su extradición a Estados Unidos.
Es decir; el PRI hecho añicos, sus operadores hace mucho se fueron a MORENA o al PAN, el año pasado apenas logró quedarse con 6 alcaldías de las chiquititas; 6 de 43, él preso y reclamado por EU ¿qué puede ofrecerle a MORENA, a AMLO?.
Si AMLO sin estructura en Tamaulipas logró arrasar y ganar hasta las senadurías de mayoría, ¿a poco necesita de Geño en la elección de junio?
No me extrañaría que un Ricardo Monreal o alguno de sus operadores, haya hecho un trato con la familia de Geño y hasta se ganaran una buena lana por la gestión para oír de su caso, pero de eso a que AMLO pacte con uno de los que asegura le robaron, se me hace casi imposible y menos si éste no tiene casi nada que ofrecerle en lo electoral.
Échenle un ojo a los operadores, a los grandes, operadores de Geño, ni por asomo van a volver pronto a Tamaulipas, el mejor, o debo decir el peor Ricardo Gamundi Rosas anda de ‘stadupero’ en los congresos de marketing político por el mundo, Manuel Muñoz Cano en bisnes similares, Óscar Almaraz desligado de ese equipo hace mucho tiempo, los demás son lo que se llama en el argot político, perras flacas y andan buscando un huesito en la administración panista o moviéndole la colita a MORENA, pero por su cuenta.
Mi teoría pues, es que Geño no tiene forma, medios, poder, para negociar con AMLO. Aunque el gobierno de la 4T todos los días nos da una sorpresa.
Guty responde a Villarreal…
La semana pasada Ricardo Villarreal, famoso en la política de Madero por sus bandazos, se dejó caer contra Agustín De la Huerta al que acusó de todo un rosario de irregularidades. Pero muy a su estilo, sin una sola prueba.
Son tiempos políticos, Villarreal es muy cercano a Andrés Zorrilla, el éxito alcalde de Madero, bajo sospecha de desvíos millonarios, por lo que todo parece indicar que por ahí va la cosa. Intentan descarrilar posibles aspiraciones de Guty para las diputaciones.
Pero De la Huerta les ha ahorrado tiempo y esfuerzo, se ha descartado por todos lo medios a cualquier aspiración, prefiere, dice quedarse en el CONALEP del que es director general y en el que ha obtenido logros históricos.