Hace varios años cuando en Llera contábamos con un pelotón de soldados, uno de estos se acercó a un varón adulto en buen estado de salud y le ordenó se pusiera de pie porque se estaba rindiendo honores a la enseña nacional frente al palacio municipal pero al fulano aquel le “valió madres” por lo que siguió indiferentemente sentado razón por la cual el militar que le pone sonora cachetada repitiéndole la orden y haciéndole saber que cuantas veces escuchara el Himno Nacional era obligación ponerse de pie en posición de firmes y descubierto de la cabeza en señal de respeto y cariño a México como a nuestro Lábaro Patrio.
Desde aquella vez no he vuelto a ver algo parecido por el contrario hoy día seguimos observando que jóvenes y adultos permanecen sentados, platicando como si nada y lo peor riéndose de sus “pendejadas” cuando se rinde honores a La Bandera Nacional y se canta el Himno Nacional Mexicano razón por la cual invito a las autoridades civiles en sus tres órdenes de gobierno así como a los maestros e Instituciones oficiales y privadas para que integren una Comisión de Honor y Justicia que tenga como propósito obligar a todo mundo ponerse de pie cuando se canta o
se escuche el Himno Nacional Mexicano y se rinde honores a nuestra Bandera como a los héroes que nos dieron patria incluyendo nuestro Himno a Tamaulipas como a sus héroes.
Por lo tanto aquí le dejamos la propuesta al alcalde Héctor de la Torre Valenzuela como a su esposa la señora Patricia Quintanilla Arcos así como a los que integran el ayuntamiento para que pongan en acción y practica esta invitación misma que hacemos extensiva al resto de los municipios que integran Tamaulipas esperando que encuentre una muy buena respuesta popular.
A propósito lo anterior trae al recuerdo que cuando era niño tenía por costumbre izar mi propia bandera en la barda de mi casa y aunque no lo crean pero siempre traía en mis bolsillos del pantalón una réplica de nuestra enseña nacional hasta que llegó el momento en que la autoridad municipal le pidió a mi padre don Guadalupe Villarreal Silguero que me ordenara no izar mi bandera al momento que también el Ayuntamiento como las escuelas lo hacía en el palacio municipal.
Mi padre como buen mexicano y liberal por añadidura jamás me reprendió como tampoco ordenó no lo hiciera por el contrario le daba gusto lo que hacía y les respondía que ojalá todo mundo hiciera lo que yo hacía.
Con el correr de los años entré al ajefismo y más tarde ingresé a la Logia “José de Escandón y Helguera ”, incluso mi esposa pasó a formar parte del ABC femenil y mis hijos son liberales como también lo son mis nietos razón por lo cual no me canso de decir que seguiré siendo masón hasta más allá de muerto.
Hoy da tristeza observar como el liberalismo va a la baja en el pueblo de mis mayores y de aquellos viejos liberales solo el recuerdo queda razón por la cual les digo que mucho me gustaría que la masonería, el ABC femenil en sus dos niveles y el ajefismo volvieran a resurgir como en aquellos años cuando el liberalismo llegó incluso a gobernar mi pueblo y también Tamaulipas.
HASTA MAÑANA Y BUENA SUERTE