Como en sus mejores tiempos, los priistas de Tamaulipas tuvieron su reunión de la unidad en el Everest de Ciudad Victoria, en su nuevo partido, al que sus habilidades de saltimbanquis, traicioneros y busca huesos los han llevado ante la inminente muerte del PRI: el PRIMOR.
Así es mis queridos boes, para los priistas cuerudos que perdieron casi todo con Baltazar Hinojosa en el 2016 queda claro que, como dice su nueva lideresa nacional Yeidckol Polevnsky se oye mejor ‘primor’ que ‘prian’ y ya están ahí, despojados de la revolución que tanto les dio y cuyos postulados juraron defender.
No, no pudor, ni tantita pena, esos que hasta el 2016 e incluso hace unos meses llamaban ‘viejo loco’ al Presidente Andrés Manuel López Obrador, el sábado ya estaban enfundados en los colores de MORENA, franquicia electoral, su nuevo trampolín para acceder al poder, a los negocios de la política, a las nóminas que ahora extrañan.
Alejandro Rojas, coordinador de asesores en el Senado de mayoría pejista y personero de Ricardo Monreal, fue el anfitrión de los PRIetos, les tendió alfombra roja y les hizo caravana, esperando que el grueso de la militancia ahí reunida hiciera lo mismo, pero no fue así.
Es más, ni si su principal ‘fichaje’ Oscar Luebbeth Gutiérrez fue bien recibido, ni por sus millones, ni por sus dotes de mapache, la fiesta pues, se convirtió en una escaramuza de reclamos, señalamientos, denuncias.
En su cara le dijeron a Rojas que Renato Molina, el delegado de MORENA en la entidad había vendido candidaturas y que por eso en algunos municipios habían perdido en la elección pasada, que se las entregó a los del PRI.
Le advirtieron a Rojas que no van a volver a permitir que les quiten a los morenistas que vienen desde abajo las posiciones que les corresponden y se las entreguen al ‘cascajo’ priista recién llegado.
Jorge Salomón, morenista de Mante, no se anduvo por las ramas, llamo en sus narices ‘cascajo’ y huachicoleros a los PRIetos recién llegados: Luebberth, Jaime Rodriguez, Ricardo Rodríguez, Javier Villarreal, Guadalupe Herrera Bustamante, Libertad García, Elíseo Castillo, Reynaldo Martínez, Felipe Garza y Fernando Mancilla, entre otros.
Ni cómo refutar a don Jorge Salomón por su enojo ante el arribo de quienes vivieron sus mejores momentos con el viejo PRI, Luebberth dos veces alcalde y súper secretario en los tiempos de Tomás Yarrington, Herrera Bustamante ex procurador en los sexenios de Manuel Cavazos Lerma y Eugenio Hernández Flores, juez con Egidio Torre y si le googlean su nombre encontraran maravillas de él.
Villarreal ex alcalde de Mante funcionario con Cavazos Lerma, secretario de turismo con Eugenio, Jaime Rodríguez Secretario General de Gobierno con Cavazos, su hijo Ricardín diputado local cuando Egidio. Felipe Garza, todo en el PRI, hasta dirigente estatal.
Pues claro que a los de MORENA que estaban ahí antes de que se pensara en serio que podrían ganar la elección les encabrona que lleguen personajes como estos, porque entienden que no van a andar colgando pendones o haciendo brigadas de impacto en las esquinas, mucho menos echando porras en los eventos, desde luego que van por los ‘huesos’, por las posiciones donde hay forma de sacar provecho personal.
Por eso la reacción del sábado de los morenistas que ya advirtieron la broca que se viene encima con la llegada de los priistas a su partido.
Por lo pronto hay que decirlo como es: la fiesta de bienvenida resultó todo un fracaso, no los cuadros viejos de MORENA los rechazan y la dirigencia nacional está advertida de que entregarles candidaturas sería una declaratoria de guerra interna que no les conviene pelear.
Declaratoria de guerra interna que tal vez ya está hecha, si notamos las ausencias a la reunirán de ‘unidad’. No estuvieron ni más ni menos que: los senadores Américo Villarreal y Guadalupe Covarrubias, ni Mario López Alcalde de Matamoros, bueno ni subirá José Ramón Gómez Leal, el súper delegado.
Los registros del PAN…
El fin de semana se registraron en la sede del PAN estatal como precandidatos a diputados locales entre otros: Miguel Gómez Orta que va por el Distrito de Altamira que contempla también a Aldama. El representante del gobierno en el sur de Tamaulipas (ya presentó su renuncia) estuvo arropado por militantes de ambos municipios el sábado.
Ese mismo día Gerardo Peña hizo lo propio, el ex titular de SEBIEN va por uno de los distritos de Reynosa y también fue cuerpeado por secretarios estatales y simpatizantes fronterizos.
Ayer el plato fuerte de los registros fue el de Arturo Soto, el subsecretario de ingresos, quien va por uno de los de Victoria. De los registros ha sido el más festivo, más de 3 mil panistas lo acompañaron. Ahí estaban también, varios secretarios de estado y hasta el alcalde Xicoténcatl González.