El tiempo se detuvo, desde el 1 de julio del 2018, sigue toda la nación en campaña, los perdedores, el ganador y los votantes, mantienen los mismos diálogos y debates, unos con encono social, otros aun rebosando de contentos. Estaríamos mejor con López Obrador, era la promesa.
Orondo AMLO festeja la victoria. Son apenas siete meses de la gestión federal, realmente cortó tiempo para visibilizar cambios drásticos y benéficos, en los planes de gobierno casi todo va a mediano o largo plazo, así que debemos esperar el parte de la historia para esta era. Mientras, quien le quita lo bailado.
Como en todos los cambios, la constante es que los nuevos llegan a aprender a gobernar, a ensayo y error ejecutan las nuevas políticas públicas, como si en verdad fueran neófitos, perono lo son, todo el gabinete legal y ampliado, son personas adultas en plenitud que toda su vida han vivido dentro y de la política, el Canciller fue regente de la capital, la titular de SEGOB, ministra de la Corte, por colocar aquí solo dos ejemplos; en el senado y en la cámara de diputados, también trabajan los que toda su vida han estado metidos en la política, todos militaron antes en el PRI y después en otro partido, como el mismo presidente. No hay excusa, no deberían fallar.
Los rostros de la política mexicana son los mismos que se han retratado en la historia política de este país, desde la época de Salinas de Gortari, solo cambian de partido y de puesto, el ADN es el mismo, por lo tanto, discursos y acciones no varían. Y en esas cosas de coincidir, el lanzamiento espectacular de la Guardia Nacional se da en medio de los festejos de la 4T, pero sin reglas claras aun definidas, con más dudas que respuestas.
Quizás el cambio más radical se da en la ciudadanía, que se registra más informada y participativa, aunque en masa se le siga moviendo por medio de los intereses partidistas. Las concentraciones de este mes de julio son indicativos de que la campaña sigue.
En Boca Cerrada
CIMAC noticias da a conocer que la RNR, Red nacional de refugios para mujeres víctimas de violencia de género exigen los subsidios federales pendientes de asignación a estos espacios, que requieren con urgencia los apoyos para seguir salvando vidas de mujeres en riesgo.
En el mes de febrero se abrió la convocatoria para que los refugios concursaran por el dinero, se asignaron 346 millones 482 mil pesos para este año, pero ya entramos al séptimo mes del año y estos no han sido entregados.
Los refugios temporales para las víctimas de violencia agrupados en esta red suman 41, más 39 centros de atención externa, que atienden a más de 25 mil mujeres y sus hijos, algunos son operados por organismos de la sociedad civil y otros por instituciones públicas, a todos urge el recurso destinado a proteger y garantizar el derecho humano de las mujeres a vivir una vida libre de violencia.