El dirigente nacional de MORENA, Alfonso Ramírez Cuéllar, visitó Madero, Tamaulipas. Tres objetivos, lo trajeron al bastión lopezobradorista tamaulipeco: reunirse con la militancia del sur del estado; visitar al alcalde morenista mejor evaluado del país –Adrián Oseguera Kernión–, y llevarse una radiografía de su partido en la entidad que el 2021 podría convertirse en la primera fuerza política regional.
No fue casual la presencia de Ramírez Cuéllar en el emergente sur.
Tiene décadas de cercanía con Tamaulipas. Desde sus días como dirigente del Barzón –aquella organización que alcanzó una potencia amplia porque defendía a ciudadanos expoliados por la voracidad de la Banca– ha mantenido vínculos con los grupos sociales y ciudadanos de esa comarca.
Su coincidencia con el proyecto de Oseguera Kernión, tiene su origen décadas atrás. En la época de mayor gloria del PRD, cuando Andrés Manuel López Obrador, era su dirigente nacional, la familia del hoy alcalde intentó ampliar la influencia del perredismo en la urbe petrolera: fue candidato a la presidencia Abel Oseguera Kernión.
Sólo el manejo desaseado de la elección y la traición de Joaquín Hernández Correa –quien gobernaba el pueblo– que decidió echarse en manos del gobernador Manuel Cavazos Lerma, impidió el triunfo de Abel. López Obrador y Ramírez Cuéllar lamentaron el resultado; los Osegue-
ra perdieron la elección, pero ganaron
el respeto de estos dos personajes por
el esfuerzo y su aporte a la lucha de la Izquierda tamaulipeca.
¿La estancia de Ramírez Cuéllar, fue un espaldarazo para Oseguera Kernión?
Sí que lo fue.
No sólo reconoció su trabajo político administrativo al frente del Ayuntamiento; también, estableció que el alcalde morenista tiene el derecho de buscar la reelección por el partido que lo llevó a la Presidencia municipal.
(Esto, no únicamente desmanteló un mito de otros aspirantes al cargo, que esgrimían que en MORENA no existe la reelección. Verdad a medias; quienes no pueden reelegirse, son aquellos que han llegado a cargos por la vía de la Representación Proporcional; es decir: los plurinominales sí tienen ese veto jurídico).
La gira del Ramírez Cuéllar, se inserta dentro de la estrategia para fortalecer a su partido con la vista puesta en el 2021. Y en la estrategia de Tamaulipas, el alcalde maderense juega un papel trascendente: es el único municipio –de los 43 del estado– en donde MORENA tiene estructura probada y posee influencia social de consensos amplios con el liderazgo de Oseguera Kernión.
La confianza del dirigente nacional de MORENA en el Presidente municipal de Madero, se ha construido en décadas de converger en objetivos de la Izquierda en los que han participado conjuntamente. De hecho, eso fue uno de los puntos que abordaron en su encuentro: continuar en el trabajo de sumar fuerzas para la consolidación de la IV T en Tamaulipas. Y mejor desde el municipio: en donde realmente la sociedad tiene contacto con el poder público y percibe en esa cercanía la eficacia o la ineficacia de la autoridad.
Tanto Ramírez Cuéllar como Oseguera Kernión, saben que el foco de atención es el 2021. En ese contexto, están la declaraciones a la Prensa del dirigente morenista: “Adrián ha hecho un excelente trabajo como alcalde”. Con ello, cierra el paso a especulaciones con un mensaje claro y fuerte: la reelección está en marcha.
Se infiere: MORENA ya inició a delinear el mapa de candidaturas para el próximo año. Madero, parece ser la primera chimenea regional donde sale humo blanco. Oseguera Kernión enfrentaun grande compromiso y una amplia tarea: permanecer al frente de un Ayuntamiento que tiene sobre si la escrutadora mirada de una sociedad crítica y participativa y un sitio que MORENA quiere seguir poniendo de ejemplo en el contexto regional y nacional.
Se ve el diferente estilo de dirigir de Ramírez Cuéllar.
Nada que ver, con la estrategia perdedora de Yeidkcol Polevnsky que hundió a MORENA el 2018 en Tamaulipas.
El lopezobradorismo, ya dio el banderazo de salida por el 2021 tamaulipeco.