El de Emilio Lozoya ya será un caso que marcará un antes y un después en la política de México, su traición a Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray, con los que defraudó a PEMEX y se alió con la brasileña Odebrecht para invertir en campañas comprando futuro obligará a los corruptos a pensarlo dos veces o buscar otras vías para enriquecerse.
Así es mis queridos boes, la denuncia que ayer hizo ante la Fiscalía General de la República el ex director general de Pemex indica que en política, como en la delincuencia organizada, no hay alianzas para siempre y que a cambio de salvar su pellejo, cualquier delincuente puede echar de cabeza a los jefes de la banda.
Alejandro Gertz Mañero, el Fiscal General de la República, fue quien dio el campanazo ayer, en un mensaje a la nación, en una cadena nacional no oficial, pero cuyo contenido retumbó en cada rincón del país; Emilio Lozoya señaló directamente a Peña Nieto y a Videgaray de ordenarle manejar los sobornos con Odebrecht y repartirlos para la campaña.
“En el caso de Odebrecht este individuo (Emilio “L”) está señalando que hubo una serie de sobornos por una cantidad que pasa de 100 millones de pesos, de los cuales fueron fundamentalmente utilizados para
la campaña 2012 para la presidencia de la República, y el que después
fue presidente (Enrique Peña Nieto )y su secretario de Hacienda (Luis Videgaray), son las personas que este individuo que está presentando la denuncia, señala, que fueron los que le ordenaron, que ese dinero fuera entregado a varios asesores electorales extranjeros que colaboraron y trabajaron para la campaña de estas dos personas”, dijo Gertz Manero
Es decir, muy pronto habrá noticias importantes sobre la situación legal de Peña Nieto y Videgaray, el ex presidente, hasta donde se informó la semana pasada estaba en España, aunque su novia se reportó con Covid-19 en Estados Unidos.
De hecho, la semana anterior corrió la versión de que Peña Nieto estaba en la Madre Patria, bajo custodia policial, lo que fue desmentido por la propia 4T.
Hoy la cosa es diferente, con una denuncia que le ubica como el cabecilla de una conspiración para utilizar sobornos de Odebrecht y lo que seguro resultará de la otra averiguación por los daños a Pemex por la compra de chatarra, podríamos presumir que no tarda en ser declarado prófugo de la justicia.
En la misma situación jurídica estará Videgaray, a quien sus diferencias con Lozoya lo vuelven incluso más vulnerable, luego de que el ex director de Pemex puede incluso hasta ponerle más pecados al ex titular de Hacienda para vengarse.
El desarrollo de este proceso, es quizá el único acierto de la administración de Andrés Manuel López Obrador, si es que se mantiene como hasta ahora, apegada a derecho, sin usar a Lozoya como vehículo para venganzas políticas.
Y es que la simple declaratoria de prófugo contra Peña Nieto le va a dar puntos a AMLO ante la opinión pública, recuperará algo de lo perdido.
¿Se imaginan a Peña Nieto bajando de un avión esposado, despeinado, sin el frívolo glamour que lo caracterizó desde que fue gobernador del Estado de México?, ¿se imaginan el escándalo en su traslado hacia un reclusorio y luego la filtración de su ficha delincuencial?.
Por eso digo arriba que el de Lozoya marcará un antes y un después, porque una vez tocado un presidente, en este caso Peña Nieto, no habrá intocables en este país.
Lo será además, porque se convertirá en la estocada final al PRI, que aunque por todos los medios busca deslindarse de Peña Nieto, Lozoya y Videgaray, no hay forma de que lo haga y menos cuando su dirigente Alejandro Moreno es del mismo perfil que los acusados.
Me pregunto ¿a cuántos servidores públicos corruptos en México ahora les está dando vueltas en la cabeza la posibilidad de haber dejado un cabo suelto, la posibilidad de haber sido grabado, el peligro de que alguno de sus cómplices lo traicione como Lozoya a Peña Nieto?.
Hoy tengo que reconocer que esto es un acierto, por lo menos momentáneo del gobierno de la 4T, pero de que le sirve de cortina de humo para desviar la atención de los desastres en: salud, economía y seguridad, no me queda duda.
Del tema insisto, se va a hablar
y escribir mucho, creo que a propósito se extenderá de aquí a junio del próximo año, porque a AMLO
le interesa sobremanera mantener la mayoría en el Congreso y está puede ser su única carta presumible para entonces, luego de que reiteró en salud los muertos por el Covid pueden llegar hasta los 100 mil para entonces, la economía habrá caído a niveles históricos y la inseguridad estará peor que ahora.
Ahora que si se trata solo de circo mediático y que Lozoya haga acusaciones para las que no tiene pruebas, en lugar de ser un trancazo a favor de López Obrador y su 4T este caso podría hundirlo junto con MORENA igual que al PRI.