ESTADOS UNIDOS.- La demora para cruzar los puentes internacionales hacia los Estados Unidos ha llegado ya hasta la casi seis horas debido a que el Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza ha endurecido sus medidas para evitar las viajes no esenciales hacia el vecino país del norte, como una de las medidas para evitar los contagios de coronavirus.
Desde Matamoros a Nuevo Laredo los puentes internacionales en Brownsville, Progreso, Hidalgo, Mission, Pharr y Laredo se encuentran atestados de automovilistas que pretenden regresar a Estados Unidos, haciéndose largas filas.
La situación obedece a que el CBP ajusto horarios para viajes esenciales y no esenciales. Así de lunes a viernes los cruces son de seis de la mañana a las nueve horas y de las 16 horas a las 21 horas, en tanto que los días sábado y domingo son de las 10 de la mañana a las 14 horas.
Este nuevo horario fue establecido desde el pasado día 21 de agosto y tiene por objeto reducir los viajes no esenciales y con disminuir el riesgo de contagios por COVID-19.
El CBP indicó que el tiempo de espera es que sigue habiendo viajes no esenciales hacia ambos lados de la frontera, por lo cual se exhortó a la ciudadanía de ambos países a evitar los viajes no necesarios.
Según los reportes los tiempos de espera han llegado hasta las seis horas.
Además los cruces se han hecho lentos debido a que los oficiales del CBP interrogan a los viajeros sobre su propósito de ir a Estados Unidos, se les cuestiona si han tenido síntomas de coronavirus y demás.
Hay personas que prefieren cruzar de noche la frontera pero aun así deben hacer esperas de hasta tres horas.
Se prevé que las largas filas para cruzar la frontera se habrán de prolongarse aún más ya que Estados Unidos contempla mantener las medidas sanitarias de prevención e incluso endurecerlas debido a los altos índices de contagios que hay en Texas.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO