Aunque el enemigo más visible del presidente ayer fue el Banco de México y en especial su titular, Tamaulipas y la persecución de la 4T hacia el gobernador FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA sigue siendo nota de portadas; muchas de ellas descabelladas, desproporcionadas y hasta amarillistas.
Así es mis queridos boes, sucede que desde más allá de la sabia calle, desde fuera de las fronteras de Tamaulipas y bajo hipnótico sonido del aire acondicionado de las oficinas de algunos periodistas es fácil caer en las versiones de fantasía que inspira el pleito legal y político.
Para levantar las cejas, las primeras ‘crónicas’ de correspóndales que vendían la versión de una CasaTam convertida en un ‘bunker’, custodiadas de tanquetas y elementos policiacos de elite fuertemente armados y dispuestos, así lo decían, a todo.
De hecho en forma sarcástica recordé en mi cuenta de Facebook a la famosa, al menos entre los de 50 y más, ERIKA VEXLER, por allá por los 90’s corresponsal de Televisa en Tel Aviv, Israel, cuya crónica anunciado guerra atónica se hizo famosa: “Es un ataque nuclear Jacobo, repito, nuclear, nuclear”.
Fue exactamente en 1991, en la guerra del golfo, la primera. Por esos años los que ya éramos glotones de la noticia teníamos que creerle a VEXLER, porque además lo decía en el noticiero de las primicias de aquel entonces.
Atónitos, esperábamos la reacción de Estados Unidos, eterno aliado de Israel, y no, no sería una nota diplomática, ni un embargo económico a los países árabes, lo que teníamos era una respuesta nuclear y con ello el inicio de la tercera guerra mundial.
Luego nos enteramos que la señora VEXLER, de origen chileno-israelí le exageró a su crónica y lo que en realidad narraba no eran misiles nucleares, sino proyectiles estándar que igual mataban, pero nada que ver con la llegada del holocausto como JACOBO ZABLUDOVSKY y los que la oíamos creímos nos estaba adelantando.
Bueno, por eso el fin de semana recode en mi face a ERIKA VEXLER, porque veía la crónica en uno de los noticieros de radio que se trasmiten por tele, en la que el periodista insistía en que las inmediaciones de la CasaTam eran un búnker y que estaba resguardada por tanquetas y policías de élite.
No son los tiempos de ERIKA VEXLER, hoy no dependemos de ojos y oídos de u corresponsal para enterarnos de la mayoría de los hechos gracias a la tecnología, en especial a las redes sociales.
Imagine a VEXLER, porque la realidad es que en CasaTam hay dos unidades blindadas de la Policía Estatal, muy distinto a tanquetas, el equipo de vigilancia armada no es ni por mucho algo a lo que se le puede llamar búnker, porque hay ni más de una docena de elementos para el resguardo de la casa oficial.
Es decir la vigilancia es casi la misma que antes de que comenzara el pleito político y legal entre el Estado y la 4T.
¿Si eso fuera un búnker con tanquetas y elementos de élite dispuestos a todo, se imaginan a los microbuses azules bajando pasajeros a 20 metros de la puerta de CasaTam?, ¿cómo imaginar a un puesto de vacunación a 25 metros de la puerta de la misma residencia, convertida en búnker?.
Ha sido tal la exageración, que ayer, supongo convencido por las crónicas estilo ERIKA VEXLER, el prestigiado periodista RAMÓN ALBERTO GARZA, de Código Magenta hizo su propia versión del holocausto que nos vendió la ex corresponsal de Televisa en Tel Aviv.
Y es que GARZA dijo en su editorial que el gobierno federal tenía un plan para la toma armada de CasaTam y que en el frente tamaulipeco había 4 mil policías para repeler el ataque.
“Desde la Ciudad de México se fraguó un operativo de asalto de la Casa Tamaulipas, sede de la residencia oficial, la intentona buscaba enviar 40 ministerios públicos para peinar la capital Ciudad Victoria para localizar al gobernador, del cual se desconocía su paradero”, publicó el ex director de ElNorte de Monterrey
“Ese operativo sería apoyado por unos 500 elementos de la Secretaría de la Defensa que estarían prestos para apoyar las acciones del Ministerio Público o cualquier otra reacción que se diera desde el poder ejecutivo estatal”
Y sigue con su relato digno de una serie de Netflix: “Pero en los círculos de la inteligencia norteamericana fue detectada la intentona y de inmediato se encendieron los focos rojos”
Lo más chistoso de la versión del periodista viene cuando escribe sobre el poder de fuerza del frente de batalla del lado de Tamaulipas
“Esos órganos de inteligencia determinaron que el gobernador CABEZA DE VACA disponía de algo más de 4 mil efectivos policiales, locales y estatales dispuestos a salir a defender la soberanía del Estado de Tamaulipas frente a los embates provenientes del gobierno federal”.
Dijo que: “La posibilidad de una refriega (batalla) entre fuerzas federales y estatales presagiaban el equivalente a un conflicto civil en un estado colindante con los Estados Unidos”
Lo más curioso es que el video que usa Código Magenta para ilustrar la columna de RAMÓN ALBERTO se ve pasar a una señora haciendo ejercicio muy campante junto a la puerta de CasaTam.
Ya en serio, quienes nos dedicamos al reporteo y los que leen o ven noticias, saben que en CasaTam y en sus inmediaciones no cabrían 4 mil policías estatales. Sabemos que si bien el Estado si cuenta con una fuerza de varios miles de elementos están dispersos de Nuevo Laredo a Tampico.
Hoy es fecha de que ni siquiera sabemos bien si existe orden de aprehensión contra el gobernador y que si el operativo armado que dicen estaba planeado pudo haberse hecho sin mayor resistencia, porque ahí en CasaTam no hay más que un puño de policías estatales… ¡es un búnker Jacobo, es un búnker… son tanquetas Jacobo, son tanquetas!, son otros tiempos.
POR MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA
twitter @melitong
