CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Amenazas, empujones, gritos y descontentos, fue lo que se pudo presenciar en la jornada de vacunación para rezagados contra el COVID-19 en el municipio de Victoria.
Y es que fueron miles los que llegaron a querer inmunzarse contra la enfermedad desde la madrugada del 3 de noviembre, juntándose así más de 5 mil personas que quisieron ser atendidos con el biológico Pfizer en sólo día.
Durante la mañana del miércoles, de las 8 a 9 horas, fue cuando la alarma de «Alerta, Alerta, Docente» se activó casi 10 veces, lo cual ocasionó el enojo de los profes que querían dobletear la vacuna cuando ellos ya habían sido inmunizados desde abril pasado con la CanSino.
En ese tema se suscitó el primer altercado, puesto que una mujer reclamó a los Servidores de la Nación el ¿porqué «los quemaban»?, puesto que no era justo para ellos el humillarlos de tal modo, sólo se les podía negar el biológico y con eso bastaba, evitando ser expuestos por miles a través un altavoz.
La fémina, al parecer maestra, los amenazó con palabras altisonantes, a grado de clausurar ese punto a la fuerza, exponiendo que sí el gobierno quería regresarlos a clases presenciales pues tenían que ser vacunados.
«Ya no sigan poniéndo en evidencia a los maestros porque les vamos a cerrar todo el pinche changarro», amenazaba.
Y reiteró «yo nomas les digo, no pongan en evidencia a los maestros, ya ustedes mismos saben, no se hagan pendejos».
Al término del día se detectaron más de 200 educadores intentado vacunarse con la Pfizer, según detalló la subdelegada de Bienestar, Micaela Martínez Narváez.
Sobre las largas filas de espera, los altercados no se hicieron esperar, y entre empujones y casi golpes, algunos jóvenes defendían sus lugares de otros oportunistas que intentaban meterse entre ellos.
«Yo tengo aquí desde las 5 de la mañana, ¿porque se mete?», se quejó una joven con un policía estatal que trataba de dar orden en el tumulto de gente.
Más adelante otro chavo le reclamaba a otro que «el no iba ahí», que respetara a los que han estado ahí por horas.
«Estos cuatro no iban aquí, se están metiendo en donde no es su lugar».
Fueron hasta 5 casos de este tipo los que se presentaron tan solo de las 8 a las 12 del mediodía.
Por Antonio H. Mandujano