MÉXICO.- Si nunca te has quedado varado en la carretera, debes de saber que es una situación que puede ocurrir en cualquier momento, principalmente, por alguna falla mecánica en tu automóvil, pues los fierros no tienen palabra de honor, y las probabilidades de que esto suceda aumentan si no te tomaste el tiempo de revisarlo o de realizarle el servicio de mantenimiento preventivo antes de emprender la travesía.
Ante esto, es fundamental saber qué hacer pues, de lo contrario, puedes exponer tu seguridad, la de los que te acompañan y la del resto de los automovilistas.
De modo que, ante un escenario de esta naturaleza, lo primero que deberás hacer es mantener la calma en todo momento y tomar nota de las siguientes recomendaciones que en Atracción360 hemos preparado para ti.
PASO A PASO
Ante una falla mecánica y si tu vehículo está posibilitado para hacerlo, enciende las luces intermitentes y estacionalo en un lugar a salvo; es importante no obstaculizar la vialidad y no exponer tu seguridad.
Desciende con cuidado del coche, pues en una autopista los vehículos se desplazan con rapidez y coloca los triángulos de seguridad, a 100 pasos de distancia del carro, tanto en la parte delantera como en la parte trasera.
En caso de estar en una curva es muy importante colocar el triángulo de seguridad antes de comenzar la curva, ya que esto alertará a los conductores y prevendrá un accidente.
Si el coche se quedó en un lugar con riesgo de impacto pide a tus acompañantes que salgan, avisa a alguien de confianza lo que ha sucedido y mándale tu ubicación.
Considera que si tienes compañía de seguros para explicarles lo sucedido. Normalmente las compañías de seguros cuentan con un servicio de asistencia vial para este tipo de eventualidades.
LAS FALLAS MÁS COMUNES
– Estalló un neumático
Primero que todo mantén la calma, no te asustes y tampoco frenes de golpe. Toma el volante firmemente con ambas manos y gira lo necesario para mantener recta la dirección del carro.
Deja que el motor vaya deteniendo el auto, y cuando el vehículo haya perdido velocidad, presiona el freno poco a poco y aléjate del arroyo vial lo más que puedas hasta encontrar una zona segura para realizar el cambio de llanta.
Hazlo con cuidado, pues los rines podrían estar muy calientes y te quemarán las manos.
– Fallas en la dirección
Lo que tienes que hacer es detenerte con suavidad, ya que si frenas con fuerza el auto se desviará de su trayectoria.
Mientras tratas de parar el auto, suena el claxon y enciende las luces intermitentes, esto para advertir a los demás vehículos. Trata de detener el auto y salir de la carretera, es muy probable que necesites ayuda para mover las ruedas con la mano y sacar el auto del camino, empujándolo.
– Sin batería
La solución más sencilla ante esto es pasarle corriente conectando los cables correctamente, ya que de lo contrario puedes dañar el módulo de control del motor o la computadora central, lo que sería un gasto sumamente costoso.
Antes de ello debes revisar que la correa auxiliar o de accesorios, que impulsa al alternador, no esté rota, pues de lo contrario jamás recargará la batería.
– Frenos
Cuando abusamos de ellos puede suceder que el sobrecalentamiento cristalice la superficie de los discos y balatas, impidiendo que el vehículo se detenga con eficacia por más que se pise el pedal.
Ante ello, la recomendación es buscar un lugar seguro y detenerse por completo para que los componentes se enfríen. No les arrojes agua o cualquier otra sustancia, pues el cambio brusco de temperatura podría deformarlos y dañarlos permanentemente.
Antes de salir de casa verifica que tu coche cuente con los accesorios necesarios para enfrentar una eventualidad, y que además funcionen, como la llanta de refacción, llave de tuercas, gato hidráulico, seguro de los birlos, triángulos de seguridad y cables pasa corriente; recuerda que hombre prevenido vale por dos.
CON INFORMACIÓN DE EXCELSIOR