A partir del próximo domingo no seremos los mismos, sea que nuestras vidas sufrirán un vuelco: cambia el horario e inician las campañas rumbo a la gubernatura del estado en el escenario más difícil de los últimos sexenios. Al respecto hemos de soportar la estridencia (ya lo hacemos) por una parte, y en otro sentido el manejo de ideas y propuestas como referencia de madurez ciudadana. Los efectos han de reflejarse al término de unos dos meses que serán los más extenuantes para los sentidos que de común, tendrán la tolerancia, un mucho de enojo y de vez en cuando una mentada, sin exagerar porque tampoco se trata de ir contra la realidad sino de entender que hasta de lo más absurdo se aprende.
Pero también el horario de verano reclama fecha y no existe milagro que lo evite. Hay que despertar más temprano, hacer lo mismo en mayor tiempo, bajo la suposición de ahorro energético que la 4T lo pone en duda. “Hay que analizarlo, dice AMLO, para comprobar si vale la pena”. Es un tema reciclado cada año que por la insistencia a los mexicas poco importa, como no sea opinar que en el fondo se trata de hacer el juego al imperialismo. Ya sabéis que en la frontera el hecho se anticipa en cumplimento del más serio de los complejos vecinales que incluye sentimientos racistas y discriminatorios entre la misma paisanada que cruzando la línea divisoria, cree que la sangre le cambia nada más porque pisa “el primer mundo”, construido de explotar y robar a la débil nación que en su 4T lucha de verdad por rescatar la dignidad pisoteada durante siglos.
De manera que entre campañas y el nuevo horario, nos esperan largas y fatigosas jornadas de obligada asistencia, dado que contaminarán el espacio-aire e introducirán hasta lo más profundo de la intimidad. De verdad os digo que serán tiempos de tortura donde sin deberla ni temerla nos convertiremos en víctimas de aplicación automática. De hecho lo somos, desde que nombres y partidos se acomodaron en la ventanilla de las ilusiones exigiendo lo que a su ambición corresponde.
Por otra parte, analizar a los protagonistas o ubicarlos en el menú de las preferencias es ejercicio ocioso del cual se han de ocupar quienes cobran por hacerlo. Al ciudadano común lo que le urge es que transcurra el martirio y decidir, si es que puede y lo dejan, por aquel que mejor lo acerque a su modesta concepción vivencial. Sabe que el ejercicio del poder es privilegio propio de circunstancias a las que el hombre mediocre que pintó Ingenieros en su célebre obra no tiene cabida.
Hablamos del común que actúa con la fuerza del rostro oculto en los excesos e irresponsabilidad que impone ser huérfano de la suerte. Sea el colectivo del infortunio quien solo tiene una oportunidad de elegir tachando una boleta, obligado por la inercia de su desgracia. Por ello le urge la fecha en que han de marcarlo “para que no lo vuelva a hacer”. Es una especie de salvoconducto para que tranquilo regrese a su casa, reencontrarse con su caguama, ver el fútbol o las películas de Cantinflas (de preferencia en blanco y negro), donde hace honor a la pobreza de origen y al destino manifiesto de la vida inútil que en otro plano magnificó Pito Pérez.
¿A quién importan las campañas políticas?, solo a quienes las consideran peldaño seguro para ascender en la escala de sus perspectivas sociales o económicas. Es la oportunidad de resolver el enigma del futuro, siempre y cuando la victoria sonría, en caso contrario la medianía se volverá costumbre…y otros seis años en la vida no es cualquier cosa.
OOOOTRA ENCUESTA
Dicen que es la consulta más reciente y ha de serlo porque pone en riesgo las candidaturas de Morena en dos de los seis estados en disputa. (Durango y Aguascalientes), en tanto le concede triunfos en Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. En esta última entidad el puntaje del candidato de dicho partido varía entre 12 y 18, sobre el adversario más cercano, diferencia que no es mucha, pero sigue siendo significativa.
La empresa que la realizó se llama justamente LaEncuesta.mx (así se escribe) entre el 26 y el 28 de marzo, a mil personas mayores de 18 años a través de teléfonos celulares con un error hasta de 3.5 y es de carácter informativo, cumpliendo normatividad aplicable en la materia, según señala la metodología utilizada.
Usted dirá que es una más de las encuestas producto de la época y tiene razón, sin embargo, estaremos de acuerdo en que no está alejada de la realidad concretada en la enorme cantidad de consultas sobre el tema que poco varían en los resultados. Pero bueno, la única consulta valedera será la del día de la elección, en tanto, a tolerar la estridencia, no queda de otra.
SUCEDE QUE
Jalisco y Nuevo León ya se pusieron de acuerdo con la Federación pa’ resolver el problema del agua…acá nomás la pura resignación y persignación, que de algo ha de servir.
Y hasta la próxima.
Por Max Ávila