En el primer bimestre del año, el consumo de carne de cerdo en México se mantuvo al alza, con un crecimiento cercano al 20 por ciento, resultado de las buenas prácticas del sector, aunado a la calidad, inocuidad, abasto y disponibilidad del producto hacia la población.
De acuerdo con información de la Organización de Porcicultores Mexicanos (Opormex), en enero de 2022 se consumieron en el país 231 mil 817 toneladas de carne de cerdo, 18 por ciento más respecto a las 195 mil 738 toneladas registradas en igual mes del año anterior.
En febrero se mantuvo la tendencia al alza, con un consumo de 215 mil 374 toneladas, 19 por ciento más en comparación con las 181 mil 429 toneladas observadas en igual mes de 2021.
Este crecimiento, apuntó Agricultura, es acorde con el alza que ha registrado la producción nacional de carne de cerdo, que en el primer bimestre del año creció 2.0 por ciento respecto a igual lapso de 2021, al pasar de 270 mil 664 toneladas a 275 mil 742 toneladas.
Se trata de un aumento productivo de más de cinco mil toneladas, resultado, entre otros factores, de las acciones que lleva a cabo el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) para erradicar del país enfermedades de las piaras.
Al cierre del año pasado, la producción de carne de cerdo también presentó un aumento de 2.0 por ciento respecto a 2020, al pasar de un millón 652 mil toneladas a un millón 686 mil 802, es decir, 35 mil toneladas más, de acuerdo con cifras preliminares del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP).
El trabajo coordinado entre Agricultura y la Opormex ha colocado a México como el décimo tercero productor de carne de cerdo en el mundo y ha permitido abrir mercados a los porcicultores mexicanos, quienes cada año comercializan más de 250 mil toneladas de productos en países como Japón, Estados Unidos, Singapur, Canadá, Corea del Sur, Vietnam, Hong Kong, Chile y China.
Recientemente las secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural y de Economía, en coordinación con la Opormex, pusieron en marcha el Instituto Mexicano de la Porcicultura (IMP), cuyo objetivo es promover la investigación científica y tecnológica y acercarla a los productores de pequeña y mediana escala.