+ En todo el país, López Obrador ha perdido cerca de 15 millones de votos
+ Los debates entre Américo, ‘El Truko’ y Arturo, determinarían la elección
+ La votación de reforma eléctrica está en riesgo de aplazarse nuevamente
Una vez cerrado el escrutinio de la consulta para la revocación de mandato se confirmó su invalidez para vincularla, legalmente, porque la participación ciudadana fue mínima: 16 millones 502 mil 636 –lo que equivale a un 17.77 del 40 % de la Lista Nominal de Electores (LNE) requerido (37 millones 129 mil 287) para proceder en consecuencia–, y de ahí brotan tres lecturas: 1) La caída, en el ánimo ciudadano, de Andrés Manuel López Obrador, quien ganó en 2018 la Presidencia de la República con 30 millones 113 mil 483 votos; y, en 2022, apenas obtuvo 15 millones 159 mil 323. En cifras reales e inobjetables perdió 14 millones 954 mil 160 votos sin considerar que se ha incrementado el número de electores. 2) La fortaleza político-electoral de Movimiento Regeneración Nacional (morena) y sus aliados (PT y PVEM) asomó en toda su extensión, viéndose nutrida por la movilización de los beneficiados con programas sociales; y 3) La apatía ciudadana para privilegiar una democracia participativa, al rehusarse a votar en un ejercicio amañado, repelido a priori por las mismas autoridades electorales y mal montado, al final de cuentas. Lo cierto es que esa consulta resultó un fracaso, aunque AMLO tenga otros datos.
CASO TAMAULIPAS
Aquí, la Lista Nominal de Electores la conformamos 2 millones 722 mil 596 ciudadanos. Y acudimos al ejercicio de democracia participativa 491 mil 196.
En su mayoría adultos de la tercera edad, madres trabajadoras, universitarios y la gente que aún cree en la Cuarta Transformación del país.
A favor de AMLO, votó el 16.89 por ciento, del 40 requerido por el INE. Y según consigna el organismo que, en la entidad, preside Sergio Iván Ruiz Castellot, 459 mil 874 votaron por la continuidad presidencial.
Las estadísticas no marcan qué municipios están a favor de AMLO; sin embargo, merced a los resultados de los distritos electorales (federales), se deduce que Reynosa es, todavía con, sin y a pesar del aparato político que manipula Maki Esther Ortiz Domínguez, un feudo lópezobradorista, porque hacia su causa votaron 96 mil 498 electores (en los distritos 2 y 9). Cifras altas también las obtuvo AMLO en los otros siete distritos, cuyas cabeceras están en Nuevo Laredo, Río Bravo, Matamoros, Ciudad Victoria, Ciudad Mante, Ciudad Madero y Tampico.
Y esto, desde luego, impactaría en la elección gubernamental, porque: a) Con 459 mil 874 votos no se ganaría una elección gubernamental si en cuenta tomamos que en la lid más reciente (2016), Acción Nacional tuvo 721 mil 049 votos; y el PRI, su ahora aliado, alcanzó 517 mil 619. b) Ciertamente hay sectores ofendidos que se sumarían a otro cambio, lo que lleva a suponer que morena, PT y PVEM, incrementarían la cifra que lograron el domingo que nos antecede.
DEBATES
La Ley Electoral del Estado de Tamaulipas, en su Artículo 110 (párrafo LII), establece que en la contienda por la gubernatura deberán ‘organizarse dos debates obligatorios entre candidatos’. Pero no dicta penalización alguna a quien rehúse participar.
Como fuere ambos encuentros ya quedaron programados por Instituto Electoral de Tamaulipas (IETAM): uno con fecha 24 de abril y el otro tendrá lugar el 22 de mayo.
Los dos en el teatro ‘Amalia González Caballero de Castillo Ledón’, en punto de las 19:00 horas, pero con público reducido.
Los temas a debatir son sus proyectos en materia de salud; educación pública; desarrollo económico y empleo; estado de derecho; seguridad pública; y desarrollo social.
El primer segmento dará paso a las propuestas de cada candidato y el segundo a la interacción, que sería esencia del encuentro porque entonces se podrá hacer uso de réplicas.
Américo Villarreal Anaya, César Augusto Verástegui Ostos ‘El Truko’ y Arturo Díez Gutiérrez Navarro, ya han manifestado su intención de ir por lo menos al primer debate.
En territorio Américo y ‘El Truko’ han lucido capacidad de convocatoria despertando el interés ciudadano; y eso permite suponer que ambos harán pronunciamientos fuertes vía zoom ante un auditorio pensante, participativo y decisivo electoralmente.
Desconozco qué propuestas estén diseñando para debatir entre sí. Sin embargo, advierto que sus ‘ofertas’ definirían la intención del voto, siempre y cuando impacten entre el conglomerado que, por cierto, ya está hasta la madre por las malas conductas de funcionarios públicos federales, estatales y municipales.
En fin, hay que ver y analizar cada debate, pues de ambos dependerá, seguramente, la votación en la jornada electoral de junio próximo.
MODERADORES
Ana María Lomelí y Javier Solórzano, son los moderadores contratados por el Instituto Electoral de Tamaulipas (IETAM) para el primer debate.
Ambos han destacado como periodistas en la Ciudad de México; y nos merecen respeto, como todos los comunicadores que ejercen este oficio en todo del país.
Pero advierto que ninguno de los dos conoce Tamaulipas, así que sólo se circunscribirían al guión, previamente impuesto; evitando ahondar en los asuntos regionales, municipales y ejidales, si acaso se abordaran.
Desconozco la razón del IETAM para contratarlos siendo que aquí hay conductores tan valiosos como ellos, tanto en televisión como en la radio, y en la prensa escrita. Esta acción refleja claramente un desprecio por parte del IETAM hacia los periodistas tamaulipecos.
DEFINICIONES
El recinto donde debatirán los tres candidatos gubernamentales –léase, el teatro principal de Tamaulipas–, cuenta con un aforo de 934 localidades; y sólo tendrían cabida invitados especiales, dejando fuera al auditorio que le juega el todo por el todo a uno de esos tres proyectos.
Esto me hace preguntar: + ¿Quién definirá cuántos simpatizantes entrarán por cada candidato? + ¿Los aspirantes a la gubernatura lo decidirán, o será el IETAM? + ¿Con menos de mil asistentes ‘representativos’, Tamaulipas definiría su destino? + ¿Acaso los ‘de abajo’ no cuentan?
En fin, las fechas ya están establecidas.
Caminante no hay camino
Hay incertidumbre en el Palacio Legislativo de San Lázaro por las reformas constitucionales que este día habrán de votar los diputados federales, pues está en juego la cancelación de proyectos alternativos de energía eléctrica; y la nacionalización de litio.
No significa que la propuesta presidencial sea para abaratar las tarifas que nos cobra la Comisión Federal de Electricidad (CFE) sino de impedir la generación y comercialización a empresas privadas. Y lo más cabrón, evitar que el litio caiga en manos de particulares.
En defensa del proyecto lópezobradorista sí me manifiesto porque hay en el país 731 plantas hidroeléctricas, dos carboeléctricas, 4 geotérmicas y una nucleoeléctrica suficientes para atender la demanda, pero han sido mal aprovechadas, porque así ha convenido a intereses mezquinos de políticos y empresarios (nacionales y extranjeros).
Hasta el momento, 278 diputados han manifestado que votarán a favor de las reformas (202 de morena, 42 del PVEM, 33 del PT y un priista), pero son insuficientes para conformar las dos terceras partes de diputados –que exige toda modificación constitucional– por el rechazo de las fracciones del PAN, PRI, PRD y MC, que suman 222 votos.
Obviamente, en caso de que todos asistieran a la sesión plenaria. Entonces se requerirían 334 votos, faltándole 56 al bloque que empuja la iniciativa presidencial.
De otra forma, igual lo establece la ley, se tomará en cuenta también a las dos terceras partes de los legisladores asistentes.
En Tamaulipas, ninguno de los 9 diputados de mayoría relativa ni los 4 plurinominales han informado –como nuestros ‘representantes populares’–, de qué se trata la reforma. Y la indolencia alcanza a los morenistas Olga Juliana Elizondo Guerra, Adriana Lozano Rodríguez, Erasmo González Robledo, Claudia Alejandra Hernández Sáenz y Blanca Araceli Narro Panameño; a los dos ecologistas: Ana Laura Huerta Valdovinos y Tomás Gloria Requena; como a Montserrat Alicia Arcos Valenzuela (PRI) y los panistas Óscar de Jesús Almaraz Smer, Vicente Javier Verástegui Ostos, Rosa María González Azcárraga, Mariela López Sosa y César Augusto Rendón García. ¿Los ubica? Yo tampoco
Cicuta
Han transcurrido ya 15 días de campaña. Y el candidato que luce más irritable y ofensivo, es Arturo, al través de las redes sociales. En lugar de propuestas, recurre a la descalificación de sus pares, sólo porque se filtró que su parentela política (los Osuna) no apoya su proyecto. Como tampoco el 99.99 % del electorado estatal…