TAMPICO, TAMAULIPAS.- La carretera federal 81, en el tramo González-Zaragoza, estuvo cerrada por cerca de nueve horas, debido al traslado de las calderas hacia Ciudad Victoria y que tienen como destino final la Refinería de Tula, en el estado de Hidalgo.
Las enormes estructuras salieron del Puerto de Altamira desde la semana pasada y en su trayecto han sido cerrados algunos tramos carreteros para evitar accidentes.
La Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas, informó que después de permanecer detenidas el jueves, el movimiento realizado este viernes se llevó a cabo sobre el tramo González- Zaragoza, la altura de las letras oficiales del municipio de González hasta el entronque de la entrada al ejido Zaragoza en el municipio de Llera, por lo que se cerró la vía de comunicación en ambos sentidos, lo que incluyó el entronque que conduce al municipio de Xicoténcatl, localizado a la altura del kilómetro 40 de esta vía.
«Se prevé que el reactor arribe al ejido Ignacio Zaragoza por lo que se exhorta a la población a informarse en los medios oficiales ante cualquier cambio en la vialidad”, informó la Vocería de Seguridad de Tamaulipas.
Desde las 11:00 horas del viernes se cerró la carretera y ello provocó filas de varios kilómetros de largo y obligó a miles de conductores buscar rotas alternas.
Algunos tomaron la vieja ruta a Ciudad Mante, cruzaron Xicoténcatl y salieron por el lado poniente del municipio de González, lo que duplicó casi al doble el tiempo de traslado que normalmente es de 2 horas y media a 3 horas de Ciudad Victoria a Tampico.
Personal de la Guardia Estatal de Apoyo Carretero comisionado a la Estación Segura Escandón realizó labores de redireccionamiento el flujo vehicular.
La empresa Pesado Transport, encargada de realizar la movilización, notificó al personal de la Guardia Estatal de Apoyo Carretero comisionado a la Estación Segura Escandón que un segundo reactor se encuentra aún sobre el kilómetro 21 de dicha carretera, a la altura del municipio de González, por lo que este sábado se continuará con el traslado.
El personal de la Guardia Estatal de Apoyo Carretero se mantiene vigilante a fin de prevenir y orientar a las personas usuarias de esta ruta y debido al exceso de dimensiones, durante la noche se suspende el traslado de las calderas y esperan la luz del día para evitar accidentes.
José Ricardo Moreno Rodríguez, responsable de tráfico pesado de la empresa Pesado Transport, pidió comprensión de los automovilistas por los desvíos hacia rutas alternas.
“Nosotros tenemos el traslado de estos equipos sobredimensionados, piezas pertenecientes a Pemex como parte de las ampliaciones en la refinería de Tula, para una planta coquizadora”, señaló Moreno Rodríguez.
Sobre la carretera Tampico-Mante, desde el Puerto de Altamira en dirección a Ciudad Victoria, se desplazan dos estructuras de sobredimencionadas con destino a la refinería de Tula.
Para llegar hasta la refinería de Tula, deberán tomar la carretera federal 81 con rumbo a Ciudad Victoria, de ahí tomarán la carretera federal 126 para seguir hacia la carretera federal 80, rumbo a San Luis Potosí y en Matehuala se dirigirá a la carretera federal 57.
Las monumentales calderas avanzarán hacia San Luis Potosí, Guanajuato y Querétaro, después tomarán una ruta estatal hasta unirse a la autopista 57 para entrar al Estado de México y finalmente llegar al estado de Hidalgo.
“Estas piezas tienen una dimensión en altura de 7.50 metros y un ancho de 6.30 metros, con un peso aproximado de 462.5 toneladas”, puntualizó.
Debido al exceso de dimensiones, su avance es de 15 kilómetros por hora y se incluyen con escalas en puntos estratégicos durante las noches para continuar su trayecto con luz de día.
Por Óscar Figueroa / Omar Reyes
Expreso-La Razón
