El proceso electoral que se lleva a cabo en Tamaulipas y culminará con la jornada del 2 de junio de este año, significa un reto para las autoridades de seguridad y electorales.
El reto es mayúsculo, considerando que en la entidad se elegirán 22 diputaciones por el principio de mayoría relativa, 14 de representación proporcional, así como 43 presidencias municipales, 57 sindicaturas y 405 regidurías.
Mientras que en la elección federal serán ocho diputados al Congreso de la Unión y tres senadores, además de que los 2.8 millones de ciudadanos con credencial para votar, también lo harán para elegir al próximo Presidente de la República.
Desde el 2018 a estos primeros días del 2024, en México se han registrado 1,610 ataques, asesinatos y amenazas contra personas que se desempeñan en el ámbito político, gubernamental o contra instalaciones de gobierno o partidos.
Los datos han sido recabados por el equipo de investigación de Data Cívica y del Programa para el Estudio de la Violencia (PEV) del CIDE a través del proyecto denominado “Votar entre las balas: entendiendo la violencia criminal-electoral en México”.
Señalan que en México, “la violencia electoral se ha convertido en una herramienta del crimen organizado para influenciar la vida pública de estados y municipios”, afirmando que no existe la democracia donde impera el miedo.
Tan solo en el pasado mes de diciembre del 2023, se registraron 42 eventos asociados con la violencia político-criminal en el país, de los que cuatro pertenecen al género femenino y 32 al masculino.
La violencia se registró en Zacatecas, Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Baja California, Puebla, Chiapas, Colima, Sinaloa, Chihuahua, Ciudad de México, Quintana Roo, Mexico, Veracruz. Se trató de 18 asesinatos, 13 secuestros, además de ataques, atentados, ataques armados y amenazas a funcionarios, precandidatos y personal de seguridad de los diferentes partidos políticos.
La documentación de Data Cívica sobre este tipo de hechos violentos en torno a las jornadas electorales desde el 2018 dan un panorama de quienes son las personas amenazadas, atacadas o asesinadas.
El 78.3 por ciento de las personas víctimas de este periodo eran hombres, el 9.3 por ciento, tenían una candidatura al momento del ataque, el 47.6 por ciento eran funcionarias públicas y el 7.8 por ciento eran familiares de personas funcionarias o involucradas en el ámbito político.
La documentación de este fenómeno violento, explica que ayudará a entender mejor “esta situación que en cada elección amenaza a la joven democracia mexicana”.
En el país, Guerrero lidera la lista de estados con más ataques, pues el 11.3 por ciento de éstos ocurrieron ahí, el reporte indica 117 eventos violentos en el contexto electoral.
Le sigue Veracruz con 102 eventos violentos, incluyendo asesinatos de diferentes actores políticos y sus familiares; Guanajuato donde se reportan 110 eventos, y Oaxaca con otros 89 actos delictivos.
Estos cuatro estados representan el 38.2 por ciento de los eventos violentos registrados desde el 2018 a la fecha, mientras que por municipios, Tijuana lidera la lista con más ataques, seguido de Chilpancingo de los Bravo, Celaya y Taxco de Alarcón Al ser una elección concurrente, las autoridades del Instituto Nacional Electoral (INE) como del Instituto Electoral de Tamaulipas (IETAM), participan en las reuniones que los integrantes de la Mesa para la Construcción de la Paz en Tamaulipas, realizan cada día. En dichas reuniones encabezadas por el gobernador del estado, participan representantes de la Secretaría de Seguridad Pública, Secretaría de la Defensa Nacional, Marina, Guardia Nacional.
POR PERLA RESÉNDEZ