CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- La sequía y la inseguridad son los dos principales factores para que en Tamaulipas muchos ranchos ganaderos hayan sido abandonados o afectados en su producción.
Según los datos de la Unión Ganadera Regional de Tamaulipas (UGRT), 4 de cada 10 ranchos ganaderos tuvieron que culminar sus actividades derivados de las problemáticas antes señaladas.
Aunque la situación ya no es han crítica como al inicio de la década pasada en torno a índices de despojo o cobro de cuotas, cuando miles de estos predios fueron afectados por la situación que vivió el Estado, sigue habiendo cierto rezago en torno al tema.
José Guerrero Gamboa, presidente de la UGRT, es quien destacó que es fecha que cerca del 40 por ciento de la totalidad de unidades de producción pecuaria (UPP) siguen abandonados, principalmente por temor a ser víctimas de algún hecho delictivo.
Hasta este 2024, son entonces 14 años que por lo menos 5 mil ranchos en diferentes municipios del estado continúan solos, sin ser rescatados por sus respectivos dueños los cuales tampoco han retornado a sus respectivos lugares de origen por dicha situación.
Las ciudades o municipios rurales donde más se agudizó la situación de la inseguridad después del 2010, fueron algunos de la frontera chica como Guerrero, Mier, Miguel Alemán, Camargo y Gustavo Díaz Ordaz.
Mientras que en en la zona centro Jiménez y Soto la Marina, aseguró Guerrero Gamboa.
Afortunadamente desde el 2022 a la fecha no se han registrado más despojos de ranchos, ni abandonos de sus dueños, puesto que se cuenta con mejor perspectiva de seguridad por parte de los ganaderos y esto se refleja en su permanencia.
El titular de la UGRT señaló que la presencia de la Guardia Estatal en zonas rurales ha abonado para garantizar la calma en dichos lugares y los delitos de alto impacto no se disparen a altos porcentajes.
“Estas acciones son positivas pues dan confianza a los propios ganaderos para continuar trabajando, y mas cuando se protege a los productores de cualquier ilícito”.
Lo que destacó en torno a presencia de corporaciones, es el retorno de la Policía Rural, la cual, sería de gran beneficio para las zonas poco pobladas y donde se contiene actos ilícitos sin control alguno, asegurando que con esta división de la Secretaría de Seguridad Pública bajaría más la incidencia delictiva.
“Sería algo específicamente para el campo. Habiendo presencia de la policía se disminuye poquito, pero existe la presencia de gentes de grupos”.
Por Antonio H. Mandujano