TAMAULIPAS, MÉXICO.- La amenaza del gusano barrenador, una plaga que ha puesto en jaque a la ganadería de Tamaulipas por las pérdidas económicas y sanitarias que ocasiona, ha movilizado a instituciones académicas y productivas como lo es la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT).
Y es que la maxima cada de estudios de la Entidad, se ha integrado de lleno a este combate, aportando investigación, conocimiento técnico y coordinación directa con los productores de la entidad.
El rector Dámaso Anaya Alvarado explicó que la universidad desarrolla estudios con recursos propios y mantiene una colaboración activa con la Confederación Nacional Ganadera, a fin de reforzar las acciones contra esta plaga que afecta de manera directa la salud y la productividad del hato.
“El apoyo consiste en quitar las larvas y presentarlas en los recipientes que traen directamente desde la Ciudad de México”, detalló el rector, al subrayar que se trata de un esfuerzo coordinado con los programas nacionales de erradicación.
El gusano barrenador, científicamente conocido como Cochliomyia hominivorax, es una especie de mosca cuya larva se alimenta de tejido vivo, provocando graves heridas en los animales.
En Tamaulipas, esta plaga género desde el año pasado que la salida de ganado en pie hacia los Estados Unidos, además de poner en riesgo la salud de los rebaños al grado de provocar la muerte en casos no atendidos a tiempo.
Dentro de esta estrategia, la UAT también brinda asesoría técnica para identificar muestras y confirmar la presencia de la plaga.
Estas acciones, explicó Anaya Alvarado, forman parte de un plan integral que busca no solo contener al gusano barrenador, sino erradicarlo de manera definitiva de la región.
En otro frente, el rector anunció que la Facultad de Medicina Veterinaria está a punto de concluir la construcción de una sala de “huese”, infraestructura que permitirá engordar y procesar animales para exportación y comercialización nacional.
“Solo faltan los sellos y certificaciones del Senasica para que el rastro funcione como TIF”, puntualizó.
Por. Antonio H. Mandujano




